“Tener a la mano los elementos que se necesiten, en las cantidades que se necesiten, en el momento que se necesitan”
Primero se dio en los años ‘70 en China y luego lo implemento EEUU en los años ‘80.
Es un sistema de organización de la producción para las fábricas, pérdidas en almacenes debido a acciones innecesarias. Exige una relación más cercana con los proveedores. El sistema es flexible y permite cambios rápidos. Reduce los niveles de inventarios necesarios en todos los pasos de la línea productiva y, como consecuencia, los costos de mantener inventarios más altos, costos de compras, de financiación de las compras y de almacenaje. Minimiza pérdidas por causa de suministros obsoletos, acortamiento del tiempo de entrega, entre otras.
Por otra parte, el JIT tiene algunos inconvenientes: Se originan problemas de ruptura de stocks o retrasos si no está correctamente planificado el aprovisionamiento de materiales, y suspensiones por falta de suministros. De forma que pueden reducir los beneficios. Como las compras son de pequeñas cantidades, el proveedor puede subir el precio de las mismas. Pero con la relación a largo plazo con el mismo podemos exigir una bajada del precio de las materias primas o un aumento de la calidad, que pueden causar retrasos en la línea productiva e impactar los gastos negativamente.
Limita la posibilidad de reducción de precios de compra si las compras son de bajas cantidades aunque, dependiendo de la relación con el suministrador, esta desventaja se puede amenorar.
La idea es que lleguen los insumos a la fábrica o el producto al cliente “JUSTO A TIEMPO” Estos sistemas productivos JIT obligan a los suministradores de materia prima y componentes a programas con entregas muy exigentes. Para que se cumplan estos programas a veces hay entregas diarias.
Es un buen sistema de organización ya que esto daría la posibilidad de trabajo para mucha gente. Le ganaría a la competencia, ya que no pierde el tiempo en ir a buscar los materiales al almacén, se minimiza la hora de producción y sale más rápido al mercado
