Según datos históricos, en una pequeña ciudad a orillas del río Duero en la provincia de Valladolid, llamada Tordesillas fue que en 1494 España y Portugal dividieron tierras desconocidas y causaron que Brasil se convirtiera en el único país de habla portuguesa en América. Las tratativas fueron durante mayo y junio de 1494; el Tratado de Tordesillas tuvo un proceso de un año, incierto y con el agravante de la guerra entre ambos y la ansiedad de España por su papel en las conquistas del Atlántico. El camino para negociar el tratado comenzó cuando Cristóbal Colón, regresando de su primer viaje de lo que él creía era la India, se enfrentó con una tormenta, anclando cerca de Lisboa y, aunque sus viajes estaban patrocinados por los reyes de España, fue a Juan II, Rey de Portugal a quien le informó de su descubrimiento, quien las declaró parte de su dominio. Por otra parte, Martín Alonso Pinzón, navegante acompañante de Colón, en la Pinta, desembarcó en España e informó a los reyes de España acerca de las tierras recién descubiertas.
La colonización portuguesa fue similar a la española, pues la corona portuguesa estableció el monopolio comercial y aplicó medidas mercantilistas a los productos coloniales. Durante ese proceso, el indígena fue difícil de esclavizar por su habilidad para refugiarse en la selva, por lo que se trajeron negros de África, resultando más útiles para los portugueses que los indios, que representaban el 50% de la población del Brasil en el siglo XIX. La producción se centralizó en las exportaciones de caña de azúcar, madera de palo Brasil, que es el que daría origen al nombre del país y diamantes.
La historia de Porto Seguro se remonta a tiempos muy antiguos; ocupada por tribus indígenas, asentándose estratégicamente en la zona limitada por la Mata Atlántica y el Océano Atlántico. El 22 de abril de 1500, Pedro Álvares Cabral, comandante de la «Segunda Armada da Índia», llega al Monte Pascoal, con una flota de 9 navíos, 3 carabelas y una nave de mantenimiento. Se relacionan amistosamente con una de sus principales tribus y unidos se protegen de los constantes ataques enemigos.
Treinta y cuatro años después, el Rey D. João III divide Brasil en 15 Capitanías Hereditarias y Porto Seguro se convirtió en Capitanía de Porto Seguro, zona fértil y buena pesca en las aguas del atlántico, dos de sus mejores recursos económicos.
Porto Seguro se ha convertido en uno de los destinos turísticos más importantes y visitados del Brasil y su principal fuente de ingresos. Atracciones principales: su gran y rico Patrimonio Arquitectónico, para destacar su Centro Histórico, Patrimonio Histórico Mundial por la UNESCO, la Iglesia Matriz Nuestra Señora da Pena, en la Plaza Pero de Campos Tourinho, de fines del siglo XVIII. Un recorrido por sus 85 km de playas de aguas cálidas tales como: Taperapuá, Mundai, Rio dos Mangues, Curuipé, Itacimirim y Ponta Grande donde se pueden disfrutar variadas actividades como kayak, paseos en helicóptero, buceo, futbol playa y lambaerobica, mezcla de lambada y aerobica. Playas con piscinas naturales, arrecifes y palmeras y kilómetros de arena blanca y fina, todas rodeadas de tranquilidad y seguridad para sus visitantes. La ciudad cuenta con seis shoppings para realizar compras, y la famosa Pasarela do Alcool, avenida muy concurrida, donde se pueden degustar comidas típicas en bares y restaurantes abiertos hasta muy entrada la noche, comercios de souvenirs, pero por sobre todas las cosas llaman poderosamente la atención los coloridos puestos, ubicados a lo largo de la misma, decorados con flores y frutas donde se expenden tragos con jugos naturales y otros combinados también con bebidas alcohólicas, dentro de los cuales se destaca la Capeta, que se prepara con aguardiente de caña, chocolate en polvo, guaraná y leche condensada. El postre tradicional es el Quindim, crema elaborada a base de yema de huevo, coco y azúcar, herencia de la gastronomía portuguesa y se dice que la inclusión del coco se debe a los plantadores africanos del siglo XVII. En cuanto a la infraestructura hotelera, existe un variado abanico de complejos hoteleros de excelente nivel, resorts, hoteles y pintorescas posadas.
Arraial DAjuda, ciudad digna de atención a solo 5 km de Porto Seguro, conocida como la Esquina del Mundo por la diversidad cultural de sus visitantes. Convertida en un destino muy sofisticado cuenta con resorts de primera categoría y es de mayor nivel que Porto Seguro. Ambas ciudades se caracterizan por la calidad de sus restaurantes, para disfrutar de excelentes platos típicos, basados principalmente en pescados y mariscos. En tercer lugar nos encontramos con Trancoso, ubicada en la exuberante Costa del Descubrimiento de Bahía, uno de los balnearios más singulares de Brasil, caracterizado por su mistura entre la distensión hippie y alto nivel económico que caracteriza a las zonas exclusivas. Cuenta con resorts de alta categoría, con acceso directo al mar. La tranquilidad y extensión de sus playas aseguran un disfrute exclusivo de sus maravillosos paisajes y permite también la práctica del nudismo. Por último, el Carnaval de Porto Seguro, se realiza durante el mes de febrero y tiene una duración de siete días, comenzando con un concurso de belleza que luego finaliza con un desfile por la calle principal, donde se pasea un gran camión con bandas en vivo. Porto Seguro, un destino digno de conocer, recorrer y disfrutar, con historia, alegría, diversión a toda hora en las fiestas temáticas en las barracas de la playa y por sobre todo, la indiscutible amabilidad de su gente, que hacen que la estadía se convierta en una experiencia inigualable.
Fuentes:
http://www.bbc.com/travel/story/20170615-the-town-that-split-the-world-in-two
http://www.viajeabrasil.com/porto-seguro/historia-de-porto-seguro.php
http://www.monografias.com/trabajos105/colonizacion-portuguesa/colonizacion-portuguesa.html.com
http://www.mdzol.com/nota/596836-los-balnearios-mas-tentadores-de-brasil-ahora-que-devaluo/