28 marzo, 2024

En los últimos años se ha hablado mucho sobre el rol de la ética del trabajo, especialmente cuando se manifiesta la corrupción, el enriquecimiento ilícito, así como la falta de responsabilidad, compromiso, el interés por los aspectos individuales más que los de grupo.

Centrándome en la parte de mi profesión, que es técnica en seguridad e higiene, mas allá de que es nuestra obligación proteger la vida, la salud y el respeto hacia la dignidad humana, es muy necesario también hacer siempre un breve estudio sobre los términos o las condiciones en las que tomo mis decisiones, puesto que mis acciones pueden afectar directamente a los empleados y jefes, mas allá de tener en cuenta los derechos y las obligaciones de las personas que tengo a cargo, y de las reglas morales y la esencia en el momento de tomar una decisión como también ante las relaciones personales e interpersonales.

Como profesionales debemos tener en claro, que debemos desarrollar una ética que defina la lealtad al trabajo, profesión, empresa y compañeros de labor. La ética de un profesional es un conjunto de normas o directrices, en términos de los cuales las definimos como buenas o malas prácticas y las relaciones profesionales, cumplimos con deberes, pero también somos merecedores de derechos. Debemos tener bien en claro cuáles son cada una de las partes para poder conducirnos correctamente.

Una buena ética profesional está basada en valores, derechos, obligaciones, reglas y relaciones, los cuales nunca deben ser descuidados, al contrario, debemos promulgarla junto con el compromiso y aplicación de los interesados. (colaboradores)

Para evitar los problemas de índole ético – moral, que suelen surgir en una profesión, debemos poner en práctica principios éticos que establezcan parámetros y reglas para describir el comportamiento que una persona pueda o no exhibir en determinados momentos.

Lo difícil no suele ser poner estos principios en práctica, el omitirlos si nos traerá perjuicios propios y en el de las personas con las que interactuamos.

Como conclusión si nos trasladamos a la ética en la profesión de seguridad e higiene, estamos incorporando e implementando a través de principios y valores, fundamentos morales y éticos de carácter universal. Esto determina los patrones, valores, símbolos, lenguajes e historias, puesto que la ética nos establece pautas de conducta que debemos respetar tanto los que ejercemos esta profesión de seguridad e higiene como aquellos que la necesiten(trabajadores)

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