3 mayo, 2024

El gobierno de estados unidos presta un paquete de una ayuda de 867 millones de dólares para la industria canadiense de la madera blanda para ayudar a frenar los deberes punitivos, que vendría ser indemnizaciones por daños en los envíos destinados a Estados Unidos. También los derechos pagados por las empresas canadienses serán transmitidos parte de sus bienes y derechos a Estados Unidos (fidecomiso). Y los aranceles para los nuevos envíos serán recaudados por el mismo, durante un período de cuatro meses para los derechos compensatorios, y un período de seis meses para que la industria que exporta dicho producto tenga un precio inferior al que aplica normalmente en el mercado de su propio país (antidumping).

De esta manera, los productores de los Estados Unidos dicen que, bajo su sistema, el costo de los derechos de la madera en tierras privadas es más caro que bajo el sistema canadiense con «derechos de tala» pagados por las empresas forestales para cortar árboles en propiedad provincial. Así la Asociación de Productores Forestales de Canadá dio la bienvenida al anuncio. «Aprecio que el gobierno federal esté de pie para las comunidades forestales canadienses mediante el lanzamiento de un paquete integral frente a las acciones comerciales”.

Sin embargo en Argentina se puede observar que hay un desafío de las ventas las maderas como consecuencia de la contracción de la demanda, y las importaciones tienen un impacto que se ha visto en aumentos de stocks importados conjugados con caídas de ventas. El sector de la producción de madera está compuesto por 8.441 unidades productivas, de las cuales el 98,9% son pequeñas y medianas empresas.

La mano de obra intensiva que emplea el sector equivale a un 35% del costo total de las maderas. Se afirma que los industriales “muestran rigidez a despedir operarios”, puesto que son profesionales con alta calificación en su oficio, lo cual implica que las madereras sostienen empleo aun en contextos de baja rentabilidad; el sector tiene inclinación natural a que se aprecie el tipo de cambio para mejorar su competitividad. Pasó en el 2014, pasó en el 2016 y pasaría ahora si el dólar saltase de un día para el otro a $21, por poner un ejemplo. Entonces, el problema no es una cuestión cambiaria. Lo que necesita la Argentina es fortalecer canales para estimular la demanda.

Fuentes:

www.theglobeandmail.com/news/politics/ottawa-offers-867-million-to-help-lumber-sector-weather-softwood-tariffs/article35176908

www.telam.com.ar/notas/201705/188382-informe-industria-madera-argentina.html

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *