Nuevas teorías sobre administración.
“Siempre dale al cliente más de lo que espera”
Con el desarrollo de grandes invenciones como Internet, la sociedad se encuentra inmersa en una etapa que cambió la forma de relacionarnos, de comunicarnos, de vivir y, por supuesto, cambió también la forma de hacer negocios. Debilidades, fortalezas de la empresa, mejoramiento de la calidad de procesos, de productos y servicios, son algunas de las innumerables variables que la gerencia debe considerar en un marco de globalización. Las exigencias de los mercados en un ambiente donde impera el cambio han derivado en el desarrollo de nuevas ideas con respecto a los procesos productivos, la tecnología de la producción, la estructura de las organizaciones, el diseño del trabajo y también cambios en las relaciones laborales.
Entre estas ideas se destacan:
- prioridad en la satisfacción del requerimiento del cliente en cuanto a los productos y servicios que recibe. Aquí se tiene en cuenta al cliente final y también el cliente interno que es aquel que interviene en los procesos y/o servicios. Se considera que en los procesos de la empresa actúan clientes internos o proveedores que deben recibir sus requerimientos con un nivel de excelencia.
- Los problemas se afrontan con el desarrollo de acciones efectivas, se diseñan las soluciones con la aplicación de un plan. El mejoramiento del sistema comienza detectando y midiendo sus debilidades o errores para luego implementar la acción diseñada, volver a medir y comparar los resultados.
- Los objetivos deben ser compartidos por todo el personal por lo que se capacita, se lo entrena en forma permanente y se valoran sus aportes. Se espera un aumento de la responsabilidad en los niveles inferiores de la organización.
- Formar equipos de trabajo autodirigidos, con autonomía para decidir sus metas.
- Nuevos sistemas de recompensas para alentar las motivaciones del personal.
- Gestión de recursos basada en la cooperación, motivación, participación y autocontrol.
- Aumento de los flujos de información a todos los niveles de la empresa.
- Compromiso de los trabajadores con el destino de la empresa como fuente de empleo y una oportunidad para la movilidad social. Mejora de la calidad de las relaciones laborales, desarrollo en un clima de colaboración, cooperación y entendimiento entre sindicatos y gerencia.
- Familiarizar a los trabajadores con los factores de éxito de su empresa y su aporte al proceso con un plan coherente de información que los vincule al sistema.
Todas estas son tendencias, implican un cambio de mentalidad y cultura laboral, que se transita en forma gradual y con la intervención de todos.