Uno de los factores más importantes en la empresa a nivel superior o estratégico es el sector de dirección, en el cual se encuentra la toma de decisiones políticas que crean el rumbo que seguirá la organización. Uno de los papeles que se encuentran en dicho sector es la autoridad, la persona que tiene el poder de mandar y el derecho a ser obedecido. El jefe, además, puede ser o no un líder. Nos referimos al liderazgo como el conjunto de habilidades gerenciales que un individuo tiene para influir en la forma de ser o actuar de las personas o en un grupo de trabajo determinado de manera positiva. Esta función puede marcar la diferencia en el buen desarrollo de la organización ya que entre si existen diferencias como:
El jefe de algún modo es impuesto de manera formal y el lider es elegido informalmente por un grupo de personas que lo siguen por cuenta propia. Los jefes dan ordenes mientras que los líderes inspiran, dan ejemplos a seguir y tienen en cuenta el bienestar de sus seguidores. El líder maneja funciones directivas tales como establecer objetivos, planificar, controlar procesos y delegar autoridad en ciertos aspectos, pero ademas evalua e instruye para que su equipo trabaje con entusiasmo de manera eficiente y eficaz hacia el logro de sus metas.
En la actualidad, las personas trabajan no sólo por una remuneración económica o para sostener sus necesidades básicas; muchas también lo hacen para poder así sentir que realmente están haciendo algo que tiene valor, que les apasiona y les hace sentir realizados. Es por este motivo que la estrategia de liderazgo empresarial es tan importante. Además, es necesario crear y mantener un clima laboral de confianza y respeto, enseñando con el ejemplo y respaldando siempre el bien común, lo que luego tendrá sus frutos positivos en cuanto a la producción y las ganancias. Podemos concluir, entonces, en que para estar un paso mas cerca del éxito, lo ideal seria que el liderazgo y la jefatura vayan de la mano.