Cada año, unos 130.000 jóvenes argentinos eligen como destino la ciudad ubicada en Río Negro con el fin de llevar a cabo su viaje de egresados, pese a que, por precios, los destinos internacionales ya se encuentran en valores prácticamente similares
La alegría estudiantil tiene su precio. El tradicional viaje de egresados que desde hace décadas contratan los jóvenes que terminan el colegio secundario alimenta una industria que, sólo en Bariloche, da trabajo a 5000 personas de manera directa y otras 2000 de modo indirecto, los paquetes impulsan un negocio que tiene la demanda asegurada cada año.
Los paquetes más completos, por lo general, incluyen el valor del pasaje (ya sea en micro o en avión), el hospedaje en el hotel, días de esquí, la comida completa, trajes de nieve y barro, todas las excursiones, los traslados y las entradas a las discos.
Si bien Bariloche es el principal destino de estos jóvenes entusiastas, en los últimos años surgieron otras ciudades que intentan captar parte del negocio.Entre ellas están Villa Carlos Paz en Córdoba, Porto Seguro en Brasil y Cancún en México.
En la industria de Bariloche no notan una baja por el hecho de que se hayan abierto otros destinos, aunque sí reconocen el impacto en el consumo por el tema de la inflación, pero la cantidad de estudiantes es la misma desde hace muchos años: 130.000 argentinos, 20.000 chilenos y 5000 uruguayos.
Cuestión de precios
El precio del viaje de egresados a Bariloche comienza a acercarse cada vez más al que ofrecen otros destinos internacionales como Brasil y distintas playas del Caribe. Aunque todavía existe una brecha entre un producto y otro, la inflación también afectó la tarifa que deben pagar los adolescentes interesados en conocer el sur del país.
En el año 2014 un tour por alrededor de 11 días con todo incluido costaba entre los 12 y 14 mil pesos, un año después, en el 2015 alcanzó los 22 mil pesos. Finalmente este año, ese mismo tour ronda los 28 mil pesos, realizando viajes en micro.
En la actualidad los viajes a Brasil son la mayor competencia que encuentran las empresas que trasladan estudiantes a Bariloche, por ejemplo; en el caso de Porto Seguro, las opciones que ofrecen firmas especializadas en este destino, incluyen pagos en cuotas en dólares, en pesos o un mix de ambas monedas.
Si consideramos el tipo de cambio actual y apostamos que el dólar se mantenga por los próximos quince meses, las cifras totales que termina pagando cada estudiante hoy se acerca a los $30.000; y $35.000 los más conservadores que prefieren cubrirse ante el riesgo de una devaluación.
Por otra parte el trayecto de 11 días en un crucero, desde Buenos Aires hacia Brasil, destinado a grupos adolescentes, se vende en 40 mil pesos por persona. Aunque este paquete incluye comidas y bebidas, las comodidades propias de un gran barco y tours en dos países.
En cuanto a México, según datos de la industria, un viaje a Cancún cuesta cerca de $ 45.000, con lo cual se descubre que las cifras no varían demasiado con los valores que se manejan para Bariloche.
Bariloche no es la única opción que consideran los jóvenes a la hora de decidir a dónde viajar en su último año de secundaria, pero, aún con nuevos competidores que irrumpieron con fuerza en la escena de los viajes estudiantiles y la diferencia de precios en diferentes sitios, el tradicional destino de Bariloche se mantiene firme.
