El Turismo existe prácticamente desde los comienzos de la humanidad, con el correr de los años fue evolucionando y tomando nuevas formas. Tal vez lo vinculamos más con la actualidad, hoy es muy común hablar de turismo o referirnos a alguien como turista, de hecho en algún momento hemos ejercido o ejercemos ese rol, algo no muy común de oír en otras épocas, pero esto no quiere decir que no existían, como mencionamos anteriormente las formas y los motivos del turismo eran diferentes. En la edad Antigua se viajaba por supervivencia, para buscar alimentos y huir de terribles condiciones climáticas. También el descubrimiento de propiedades curativas de las aguas termales, influyeron en el turismo, las personas viajaban hacia estas aguas con el propósito de mejorar su salud. Pero luego con la finalización de esta era y el comienzo de la Edad Media, el turismo tomo otra importancia y otras dimensiones.
El comercio comienza a crecer provocando que las personas se trasladaran de un lugar a otro con fines comerciales. También las conquistas, las mejoras de los caminos y los senderos facilitaban el turismo para aquellos estudiosos que iban de un lugar a otro en busca de saberes nuevos. Haciendo referencia al principio de la edad media donde no existía la imprenta, y la mayoría de las personas no recibían educación, aquellos pocos que tenían la oportunidad y el deseo de aprender debían viajar para obtener conocimientos nuevos. Esto fue propicio para la creación de posadas, mesones y hostales, que se encontraban cerca de los caminos. Eran lugares de paso y de descanso, no tenían el lujo de los hoteles actuales, más bien eran incómodos y pequeños pero económicos y servían para que aquellos viajeros descansaran y luego continuaran con su viaje. También centrándonos en este período de tiempo debemos referirnos a la iglesia como pilar fundamental en el desarrollo de la sociedad de la Edad Media, no solo espiritualmente sino, social y cultural. La religión influyo fuertemente en el turismo. El turismo religioso, las Peregrinaciones más exactamente, ya existían antes de la Edad Media, pero en este momento fue su mayor auge. Los viajes de Venecia a Tierra Santa, La peregrinación de Santiago de Compostela, movilizaban grandes cantidades de personas cristianas. También debemos mencionar la peregrinación a La Meca (Hajj) que realizaban los musulmanes. Todos aquellos pertenecientes a esta religión deben hacer al menos una vez en su vida esta peregrinación no importa en qué lugares del mundo residan.
Estas peregrinaciones tan importantes marcaron fuertemente a la Edad Media. Y cambiaron los propósitos y las maneras de hacer turismo. Actualmente las Peregrinaciones siguen siendo fundamentales dentro de estas las religiones. El camino de Santiago es hasta el día de hoy un circuito turístico, uno de los más antiguos y concurridos del mundo, mantiene su esencia y el fervor de aquellos que se acercan de todas partes del mundo para peregrinar.
Ya centrándonos en la actualidad podemos decir que, el turismo fue muy importante para la Edad Media, y está para el turismo actual, muchas construcciones; Catedrales, Iglesias, Castillos son hoy grandes atractivos turísticos. La Edad media nos ha dejado un legado histórico y arquitectónico inigualable, digno de preservar para las generaciones futuras.