25 diciembre, 2024

Física II

Acústica:

El Ruido

 

 

Comenzaremos hablando de la diferencia que hay entre el sonido y el ruido que de la primera que mencionamos nace “El Ruido”.

 

  • Sonido: Es toda aquella vibración acústica que se transmite a través de un medio elástico –aire- por medio de un movimiento ondulatorio y que es capaz de producir una sensación audible.

 

  • Ruido: Es todo aquel sonido indeseado y desagradable. Es inarticulado y confuso, se caracteriza por ser fuerte. Todo sonido que interfiera o impida alguna actividad humana se considera Ruido.

 

Dentro de la Seguridad e Higiene / Ergonomía / Higiene Industrial  lo podemos encontrar como uno de los principales agentes  agresores para el trabajador.

A continuación veremos algunas de sus características y los órganos que afecta dentro del sistema auditivo.

 

Agresores Físicos y Contaminante (Ruido):

Son todos aquellos factores que pueden afectar el bienestar físico de cualquier trabajador produciendo un déficit en el SNC (sistema nervioso central).  Uno de dichos factores se presentan mediante: el Ruido. Es un sonido indeseable y desagradable produciendo fatiga y en algunos casos hasta daño auditivo.

 

Estructura del sistema auditivo: podemos dividir el oído en tres partes: Oído Externo, Oído medio y Oído Interno.

 

 

  • Oído Externo: se divide en dos partes: la parte exterior llamada pabellón u oreja y el conducto auditivo externo. La oreja es la primera fase de captación sonora. Dichas ondas pasan por el canal auditivo externo y llega a la membrana del tímpano.

 

  • Oído Medio: es un espacio hueco llamado caja del tímpano. En el interior del oído medio se encuentran el martillo, yunque y estribo. Se producen dos funciones fundamentales: la primera de transmisión del sonido hasta el oído interno. La segunda de transformación del sonido amplificándolo o amortiguándolo.

 

 

  • Oído Interno: es el mecanismo final de audición y el receptor del equilibrio. Tres partes lo forman: la cóclea, que transmite las señales del oído interno al cerebro, el vestíbulo, encargado de registrar los movimientos corporales para ser capaces de mantener el equilibrio y los canales semicirculares que lo conforman tres canales (superior, posterior y lateral) que a partir del fluido que lo compone transmite a un sistema de redes nerviosas conectadas con el cerebro, la información necesaria sobre la posición del cuerpo.

 

Ya explicado brevemente los componentes que forman el órgano principal (oído) que es afectado por  El Ruido y recordando que es un sonido indeseable, desagradable produciendo fatiga y en algunos casos hasta daño auditivo debemos tener muy en cuenta que existen cuatro factores de riesgo fundamentales que determinan el riesgo de pérdida auditiva:

  1. Nivel de presión sonora.
  2. Tipo de ruido.
  3. Tiempo de exposición al ruido.
  4. Edad.

Además de estos cuatro factores citados, existen otras características muy importantes que nos van a ayudar a determinar el daño recibido al trabajador por medio del Ruido. De acuerdo al daño que provoquen podemos dividirlos en:

 

  • Los que provocan daños inmediatos: son impulsivos, de corta duración, provocan un intenso dolor inmediato, sangrado de oído y a veces perdida del equilibrio. Se producen en trabajos como en fábricas de armas, minería, demoliciones, etc.

 

  • Los que ocasionan daños luego de un tiempo de exposición: son los más difíciles de detectar. Se deben por no tener ninguna protección, por trabajar mal toda su vida, por no tener la supervisión o instrucción laboral adecuada, por trabajar más de 8 hs. , etc. Se produce una fatiga del nervio de la audición durante la jornada laboral. Si dicha fatiga desaparece terminada la hora laboral podemos decir que no se dejan efectos permanentes. En cambio si el dolor no desaparece luego de las dos horas de a ver terminado la jornada laboral entonces es porque estamos entrando un proceso de deterioro de la audición que se caracteriza por una pérdida de sensibilidad auditiva, esta vez permanente y lo que es peor irreversible llevándonos a someternos inmediatamente a un tratamiento de Audiometría para verificar el nivel auditivo de la persona afectada. Algunos de los síntomas más frecuentes son: mareos, dolor de cabeza, náuseas, etc.

La pérdida de sensibilidad auditiva o hipoacusia no solo afecta al individuo físicamente sino que también Psicológica y Socialmente. Por qué decimos esto?…porque el la persona empieza a oír menos y esto le produce una especie de trauma, comienza a darle vergüenza, enojo,  no quiere hablar por qué se siente incómodo por no poder escuchar, bien, se aparta de los grupos laborales, como consecuencia afecta su rendimiento laboralmente y a lo igual que en las familias (discusiones, peleas, etc.).

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