La organización de eventos es una tarea de gestión, administración, control y ejecución de las más diversas tareas que se desarrollan en torno a la realización de algún evento en particular. La temática de los mismos, ha ido ampliándose hasta abarcar, en la actualidad, eventos de índole religiosa, educativos, profesionales, sociales, deportivos, empresariales, entre otros. A su vez, los formatos de estos eventos constan modalidades variadas, como ser, congresos, festivales, seminarios, convenciones, ceremonias, exposiciones, etc.
Actualmente, ya es claro que cada uno de estos trabajos, con las especiales atenciones que requieren cada tipo de evento y las modalidades de su realización, requiere un profesional capacitado para para que sean llevadas a cabo con el alto nivel de ejecución.
En la Argentina del quinquenio actual (2015-2020) la profesión del organizador de eventos, se enfrenta a un desafío doble. Por un lado, el mercado y la profesión se aprestan a incorporar las nuevas metodologías de trabajo, como ser la reconversión de eventos, la utilización de herramientas digitales de vanguardia, y un nuevo estilo de conexión con el público destinado a provocar emociones . Por otro lado, el desafío del contexto económico del país urge más a las empresas pequeñas, medianas y aquellos organizadores de eventos freelance, que no pueden amortizar la caída de la demanda, y por tanto reducir tan fácilmente sus precios, y tampoco pueden reducir costos tan eficazmente.
Es por ello que los esfuerzos del sector tienen que estar concentrados en la capacitación de los futuros profesionales y de la actualización constante de aquellos con trayectoria profesional; para que ambos estén listos para enfrentar estos desafíos.
