El mundo apunta a la “moralidad tributaria”
Las acciones de Argentina van en esa línea y se acoplan a la intención del país de ser admitido como miembro de la Organización para la Cooperación y el desarrollo económico (OCDE). Una de las razones del éxito del reciente blanqueo que implementó Argentina fue la percepción de un mayor riesgo para “esconder” el dinero en algún lugar del planeta. La tendencia, que se hizo visible con la puesta en marcha, este año y el próximo, del intercambio automático de información fiscal entre 100 países, ahora se complementa con una avanzada importante para evitar lo que se llama “planificación tributaria nociva”. Hace 10 días y en el marco de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde), más de 70 países, incluida la Argentina, firmaron un acuerdo denominado Beps, cuya sigla en inglés se refiere a prácticas para evitar la “erosión de la base imponible” y el traslado de beneficios mediante prácticas abusivas. En concreto, lo que las naciones desarrolladas buscan es evitar que las compañías multinacionales realicen una planificación tal que implique trasladar su administración tributaria a lugares de baja o nula tributación. Si bien los convenios fiscales para no duplicar el pago de impuestos están vigentes, en algunos casos estos acuerdos permiten que las empresas no paguen nada en ningún lado.Y eso es lo que se pretende evitar. En esta nota, podemos leer como Argentina toma una clara postura; la de combatir el dumping ( es la disminución del precio normal de un producto con el fin de adquirir cuotas de mercado de forma desleal) y blanqueo de capitales. Este ultimo, puede ser clave para que Argentina ingrese al OCDE. Nuestro país se alinea al mundo para evitar el desgaste económico, es decir que si globalmente se logra evitar que las empresas internacionales sucumban ante este plan, el mundo se beneficiará, ya que se podrá recaudar los impuestos que estas multinacionales con diversas maniobras fraudulentas evitan tributar, por lo tanto que Argentina también recaudará estos impuestos que se le son negados. A esto apunta el termino moralidad tributaria, a evitar hechos de corrupción, fraude y fomentar que entre los países se organicen, compartan información financiera, también dejar a tras la actos desleales que se rigen en el mundo actual, y que tienen como protagonistas a las empresas multinacionales.