18 diciembre, 2024

 

Hoy en día disponemos de una infinidad de productos de limpieza, con distintos nombres, colores y usos. Son fáciles de adquirir y su presencia en nuestro hogar está totalmente naturalizada, por ende su peligrosidad en condición de productos químicos, ignorada. Dichos productos deben utilizarse correctamente, evitar su mezcla es fundamental, ya que obtener una limpieza más profunda podría dañarnos severamente. Un error muy común que se comete al utilizar ciertos productos es no leer el contenido del mismo, obviando que puedan contener químicos incompatibles con otros limpiadores y que por desconocimiento pueden llegar a entrar en contacto desencadenando resultados posiblemente mortales. Los siguientes productos que describiré son incompatibles entre si y tienen las siguientes reacciones: Lavandina y Amoniaco: se producen gases tóxicos llamados clora minas; los síntomas son falta de aliento, neumonía, liquido en los pulmones e incluso pueden llegar a paralizar los mismos. El Amoniaco se encuentra en productos como limpiacristales, pañales o bandejas para gatos. Los Lavavajillas (detergente), y Lavandina: mezclando estos dos componentes el resultado en minutos puede ser letal, ya que se producirá el gas mostaza, La Lavandina y Ácidos: Ácidos como el vinagre, algunos limpia cristales, limpiadores para el inodoro o detergentes para lavavajillas no deben mezclarse con la misma ya que produce Gas Cloro. La mínima exposición a este gas irrita las mucosas, causa tos y problemas respiratorios, también afecta los ojos, produciendo ardor y goteo nasal, si la exposición es prolongada, sus efectos van desde problemas respiratorios, vomito, liquido en los pulmones y hasta la muerte, la Clorina puede afectar también a la piel provocando dolor, inflamación, hinchazón y ampollas; el Gas Cloro y el Agua son incompatibles ya que juntos producen Ácidos Clorhídricos e Hipoclorosos que causan quemaduras en la piel, ojos y sistema respiratorio. Es necesario siempre mantener los productos de limpieza en sus envases originales y con su etiqueta original, y fuera del alcance de los niños. Personalmente y por experiencia destaco la importancia de utilizar por separado ambas sustancias, el simple hecho de mezclarlas no nos dará una limpieza más profunda ni agilizara el proceso de desinfección, ciertas sustancias intoxican, no desinfectan, estos son conceptos totalmente diferentes y no van de la mano, utilizar las sustancias adecuadas para cada tarea puede salir más caro pero es invertir indirectamente en nuestra salud también, además mantenerlos en su envase original o en su defecto en recipientes rotulados y en su lugar correcto ubicado en sitios a temperatura adecuada y lejos de los niños o de instalaciones eléctricas, estufas, altas temperaturas , luz  del sol y demás , son practicas tan simples y preventivas que nos facilitan no solo los labores sino que nos cuidan la salud.

 

 

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