21 diciembre, 2024

 

Exportaciones en baja

El primer dato ineludible que enfrenta una industria que creció a fuerza de ganar nuevos mercados en el exterior es la pérdida de competitividad del vino argentino. Hace cinco años que las exportaciones están estancadas y en la industria aseguran que el retraso cambiario profundizó la tendencia. De acuerdo a los datos del Observatorio Vitivinícola, el sector cerró 2016 con ventas al exterior por US$ 825 millones, lo que representa una leve suba del 0,9% frente a 2015, mientras que en volumen se registró una caída de casi 3%, con casi 260 millones de litros comercializados fuera del país.

Cuesta mucho posicionar a los vinos de un país en las góndolas de los principales mercados, como por ejemplo, las de Estados Unidos, uno de los principales mercados importadores de vino del mundo.

Es un proceso lento y costoso, que requiere mucho marketing tanto de imagen como de promoción del producto, para ir logrando resultados.

Inscripción en registros

  • Inscribirme en el Registros de Importadores y Exportadores de la República Argentina en la DGA
  • Inscribirme como Exportador de Productos Vitivinícolas en el INV

Certificados

  1. Solicitar Análisis de Exportación en el INV
  2. Solicitar certificado del CATEM para embalajes de madera
  3. Obtener el Certificado de Origen A por inscripción en el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP)
  4. Solicitar Certificado de Origen en entidades habilitadas para su emisión
  5. Tramitar la Legalización de Certificados para Exportar a determinados países

 

Reintegros a la exportación 6%

Vistas al mercado interno

Una consecuencia del estancamiento de las exportaciones es que cada vez más bodegas se vuelcan al mercado interno. El principal aliciente que ofrece vender en el país es que, a diferencia de lo que ocurre en EE.UU. o Europa, cuando sale a colocar su producción localmente una bodega puede actualizar sus precios siguiendo a la inflación y de esta manera no perder rentabilidad.

El problema que tenemos en este momento es que los precios en pesos en el mercado local, al cambiarlos al tipo oficial, que es el que se paga al exportar, se han incrementado en moneda doméstica en mucha menor medida que los costos, por el atraso cambiario, al usarse este instrumento del comercio exterior como palanca antiinflacionaria.

El problema del renovado interés de las bodegas por el mercado interno es que el consumo local enfrenta una de sus peores crisis, con una baja en volumen de casi diez puntos. La principal razón de la caída del volumen es la baja en la producción que sufrió el mercado en el último año y que provocó un salto enorme en el precio de la uva de traslado, que en menos de doce meses pasó de los 6 pesos el kilo a 16 o 18 pesos. Lógicamente la suba en los costos se trasladó a los precios al público y los más afectados fueron los vinos de bajo precio que sufrieron las mayores subas en sus costos.

Opinión personal

La Argentina es uno de los países con mayor cantidad de varietales viníferos. Esto se debe, principalmente, a la gran diversidad de climas y suelos que permite que las diferentes variedades de vid se adapten al terreno argentino.

La cepa tinto más cultivada y la más característica del país es el Malbec. También se cultiva Bonarda, Cabernet Sauvignon, Syrah, Merlot, Tempranillo, entre otros. Los cepajes blancos más destacados son Torrontés, Chardonnay, Sauvignon Blanc, entre otros.

Las bodegas de vino viven el peor año de las últimas dos décadas, debido a que tanto el consumo interno como las exportaciones caen a altas tasas. La segunda cosecha escasa consecutiva por factores climáticos este año redujo el stock y volvió a elevar los precios de la uva. Esto se da en un contexto general de alta inflación, que afecta al resto de los insumos, sumado a una clara caída del poder adquisitivo de los consumidores por paritarias salariales que, en general, se fijaron por debajo del índice de costos.

En Argentina se implementan políticas públicas y programas para el fomento de la investigación y el desarrollo tecnológico en el ámbito agrícola, la transferencia de las mejores prácticas y las nuevas tecnologías a los productores viñateros de todo el país, la formación de recursos humanos, la mejora de la competitividad, y la integración de los actores de la industria a lo largo de toda la cadena de valor.

Se destaca el Plan Estratégico Vitivinícola Argentina 2020 (PEVI) que establece los pasos a seguir en materia de posicionamiento, desarrollo de mercados y desarrollo productivo de la industria vitivinícola para la próxima década. El plan surge de la colaboración de organismos públicos, privados y mixtos como el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Unión Vitivinícola Argentina (UVA), la Fundación

Posible incentivo o beneficio

Ampliar los reintegros a exportaciones de 6% a 9%. También algún sistema para aliviar el costo de fletes y un acuerdo similar al que se está por aplicar a ropa y calzado, que permite que hasta $ 8000 de salario la contribución patronal se convierta en un bono para pagar IVA y Ganancias. La industria del vid es gran generadora de empleo, generando 35 veces más empleo que la soja.

Links

http://www.inv.gov.ar/index.php/men-estadisticas/men-estadisticas-vitivinicolas/16-cat-estadisticas/63-est-menu-anual-exporta

https://www.argentina.gob.ar/vuce/exportacion-vinos-y-mostos

Alumno: Ricardo Andrade

Sede: Caballito

Turno: Mañana

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *