Antes de entrar en tema, el Conflicto se debe considerar como un preámbulo en el manejo de la comunicación que permite comprender la importancia de la prevención en el manejo de conflictos potenciales.
El conflicto es inevitable cada vez que dos o más personas interactúan, ya sea en el trabajo o en la casa. Es muy importante tener en cuenta abordar el problema, no a las personas.
Los tipos de conflictos que pueden ocurrir en cualquier organización incluyen las definiciones poco claras de responsabilidades de los roles, los conflictos de interés, la falta de recursos y las relaciones interpersonales en el lugar de trabajo.
Cuatro tipos de conflictos pueden ocurrir en una empresa :
- Definición de responsabilidad poca clara: Cuando no está claro quién es el responsable de qué área en un proyecto o tarea, puede haber un conflicto.
- Conflicto de intereses: La comprensión de cómo los intereses y objetivos personales encajan dentro de la estructura de la organización puede aliviar los problemas de conflicto de intereses.
- Sin suficientes recursos: La competencia por los recursos, incluyendo el dinero, el tiempo y los materiales.
- Las relaciones interpersonales: Las personalidades de la gente involucrada en la estructura de la organización juegan un papel importante en la resolución de los conflictos. A menudo, el conflicto es el resultado de las relaciones interpersonales en que las partes en conflicto no son capaces de resolver problemas personales con los demás.
Puede pasar que muchos de estos conflictos se enmarquen en el ámbito de las relaciones públicas, por lo tanto es importante conocer y tener en cuenta algunas estrategias y procedimientos de comunicación que se pueden utilizar para influir positivamente en el curso del conflicto, en beneficio de la organización.
Como comunicar en tiempo de crisis:
- Poner al público en primer lugar.
- Adoptar responsabilidades.
- Ser honrado.
- No se puede decir nunca “sin comentarios” o evitar responder.
- Nombrar un único portavoz.
- Establecer un centro de información central.
- Ofrecer información continuamente.
- Estar familiarizado con las necesidades de los medios de comunicación y sus plazos.
- Ser accesible
- Ponerse en contacto con los públicos clave.
- Recordar que cualquier crisis también supone una oportunidad.
GESTIÓN DE CONFLICTOS:
Un conflicto involucra un enfrentamiento entre dos puntos de vista. Es decir, a nivel simbólico se da un conflicto entre diferentes grupos atendiendo a sus propios intereses, sus demandas, sus obligaciones, su forma de solucionar un problema, etc. El conflicto adopta muchas formas, las más graves, cuando se producen guerras entre ellos
Pero muchos de estos conflictos se enmarcan en el ámbito de las relaciones públicas. Por lo tanto, es preciso conocer algunas estrategias y procedimientos de comunicación que se pueden utilizar para influir positivamente en el curso del conflicto, en beneficio de la organización.
Los elementos clave que podemos mencionar son:
- Estrategia: para lograr conseguir objetivos concretos.
- Dirección: requiere de una acción deliberada, producto de la planificación.
- Competencia: esforzarse por el mismo objetivo, la misma posición o el mismo premio que los demás.
- Conflictos: comprender la dinámica del conflicto, cuyos desacuerdos fuertes u oposición, pueden desembocar en una amenaza directa y manifiesta de ataque por otra entidad.
El conflicto, se produce cuando dos grupos dirigen sus esfuerzos uno en contra del otro, elaborando acciones y comunicación que ataca, directa o verbalmente al contrario.
El ciclo de vida de la gestión de conflictos
La gestión estratégica del conflicto se puede dividir en cuatro fases, pero hay que tener en cuenta que las fases no son absolutas y que en la práctica las técnicas pueden superponerse. Aún más, en el mundo dinámico de las relaciones públicas los profesionales ocupados pueden estar manejando situaciones de competencia distintas a la vez que conflictos, en cualquiera de las cuatro fases simultáneamente.
Fase proactiva
Esta fase incluye las actividades y los planteamientos que pueden prevenir un conflicto antes de su aparición, o antes de que vaya demasiado lejos. El primer paso de esta fase es el análisis del entorno- leer, oír y ver de manera constante todo lo relacionado con asuntos actuales que pueden ser de interés para la organización.
Fase estratégica
En esta fase los profesionales de las relaciones públicas identifican la necesidad de actuar concertadamente ante un asunto que se está convirtiendo en un conflicto emergente.
Fase reactiva
Una vez que el asunto o el conflicto emergente alcanzan niveles críticos de impacto sobre la organización, los profesionales de las relaciones públicas deben reaccionar a los acontecimientos del entorno comunicativo externo según se vayan produciendo.
Fase de recuperación
Rápidamente después de una crisis o de un conflicto de perfil alto y grave con un público, la organización debería emplear estrategias para, fortalecer, o reparar su reputación ante los ojos del público clave.
En conclusión se puede destacar que las actitudes, valores y estilos de las personas son determinantes para el desenlace positivo o negativo del conflicto. Todos los niveles de conflicto se ven afectados por el sistema de percepciones individuales
El adecuado manejo de las situaciones conflictivas llega a favorecer el clima organizacional para que los problemas se acaben dan diferentes opciones a seguir , por ejemplo: crear consecuencias, escuchar, elegir tus propias batallas e abrir la comunicación, o además pueden optar haciendo entrevistas individuales, Incluso lo mencionado no hace que dejen de provocarse conflictos pero es una buena manera de reducirlos ya sea en una organización, lugar de trabajo , etc.