El Impenetrable
Parque Nacional
“El Impenetrable” abarca cerca de 4 millones de hectáreas de bosques nativos de la región chaqueña semiárida, ubicadas principalmente en el noroeste de la provincia del Chaco. Comprende también una porción del este de Salta, el oeste de Formosa y el noreste de Santiago del Estero. Su nombre se debe a la dificultad de atravesarlo por lo agreste y tupida de su vegetación, representada por árboles como Quebracho Colorado y Blanco, Algarrobo, Palo Borracho, Guayacán, Mistol, Palo Santo, Urunday, Itín y abundancia de cactus, arbustos, fachinales, enredaderas, claveles del aire y varias orquídeas. La región alberga especies seriamente amenazadas como el Yaguareté, el Tatú Carreta, y el Oso Hormiguero. También se encuentran el Puma, La Corzuela o Guazuncho, el Pecarí, el Tapir o Anta, el Loro Hablador, el Carpintero Negro, La Charata, el Águila Coronada, el Halcón Blanco, el Carancho, el Yacaré Negro, la Tortuga de tierra y el Caimán Overo. Actualmente en “El Impenetrable” viven cerca de 60.000 personas; la mayoría indígenas (Wichís, Tobas), campesinos y pequeños productores rurales. La deforestación provoca la desaparición de los animales y otros alimentos y medicinas que utilizan las comunidades indígenas
Se creó a partir de la Ley 26.996, sancionada el 22 de octubre de 2014 y promulgada el 31 del mismo mes.
Su clima es subtropical con veranos muy calurosos e inviernos templados. Las temperaturas máximas extremas son de las más altas registradas en Sudamérica, alcanzando los 46° C.
La escasez de agua ha sido el factor limitante más significativo para la ocupación del espacio. Cuando se destruye el bosque pueden existir serios problemas de erosión de suelos, a los que agregan los problemas de salinización en cultivo bajo riego. Aún hoy permanece con baja densidad demográfica debido a las condiciones climáticas limitantes: altas temperaturas en verano, gran amplitud térmica anual, pocas precipitaciones, permanente o semipermanente deficiencia de agua, pobre sistema de servicios básicos (rutas de acceso, comunicaciones, servicios asistenciales en general. La geomorfología, condicionó las condiciones de comunicación terrestres y la instalación de pueblos).
Acceso:
Desde la ciudad de Resistencia se puede acceder por la RN 16, hasta Presidencia Roque Sáenz Peña (165 km.), y luego por RN 95 a Tres Isletas (62 km.), y a Castelli (53 Km.), en el Km. 3 tomar a la izquierda (155 km.) por la ruta tanschaco «Juana Azurduy» (de tierra, está en buenas condiciones), pero es recomendable realizar este paseo en vehículos especialmente equipados para caminos duros, ya que en días secos se transita sobre un colchón de tierra muy fina, casi impalpable, que produce huellas similares a los caminos de arena. En días de lluvia, se produce un barro muy resbaladizo donde el vehículo deja huellas muy profundas, lo que dificulta el tránsito normal. Es muy importante tener en cuenta las condiciones meteorológicas, antes de realizar su viaje a la desafiante aventura
Actualmente debido a su cortos años de vida no tiene un gran atractivo turístico, si bien esta mas centrado en proteger la fauna y flora que lo rodean.
Se sabía que el lugar funcionaba como paraíso de cazadores, al que ingresaban en forma furtiva, Ahora, en el nuevo parque arman excursiones para conocer y explorar su naturaleza divina.
Su principal actividad turística es la caminata para avistar presencia de fauna ya sea mediante la interpretación de sus rastros o por tener la suerte de verlos.
No se cobra tarifa alguna para ingresar al parque, como así tampoco hay días específicos de visitas, solo basta con tener el valor para entrar al “Impenetrable”.
Contacto
Intendencia del Parque Nacional Chaco: Capitán Solari, Chaco, (3515).
Teléfono: (03725) 499161
E-mail: [email protected]
Conclusión Personal:
Si bien el parque es joven, sería bueno que el gobierno argentino invirtiera un poco más de fondos en él, así se podría montar más infraestructura dentro del mismo para realizar muchas más actividades turísticas. Se destaca el compromiso que tienen con la recuperación y conservación de su naturaleza tanto como en su flora como fauna. No es de olvidarse las comunidades indígenas