28 diciembre, 2024

La imagen en términos de RRPP (también a nivel corporativo) es la construcción mental que se da o se forma en la mente de los diferentes públicos o en el caso de lo personal personas con las cuales nos relacionamos en todos los ámbitos. Por ende esto está ligado directamente a los sentidos, es decir influye el cómo nos ven, con todos sus aspectos. Esta imagen no está solo ligada a la expresión propiamente dicha sino al conjunto de todas las actitudes, no hay que olvidar que el principal lenguaje es el corporal, con el también podemos demostrar desde nuestro grado de cortesía, educación, expresión, etc. Según estudios solo el 20 % (por poner ejemplo y volcarlo a cifras) de la comunicación directa que podemos tener con un tercero es el habla el 80 % restante lo expresamos a través del lenguaje corporal: gestos, posturas. Que se representa en el estudio o conocimiento de varios aspectos:

  • Proxemia: las distancia en las cuales nos ponemos en base a la persona con la cual nos estamos comunicando. Hay tres: social: 1,20 mt aprox. Personal: 0,30 mts a 1 y interpersonal: 0,3 mts a 0. Obviamente que el saber “manejar” los mismos dependiendo con quien nos encontramos marcara la diferencia.
  • Háptica: Estudio del contactó con las personas. Es decir que tanto y cuanto podemos o no mantener un contacto físico directo con el otro.
  • Paralingüística: Volumen, tono y velocidad en la cual nos expresamos.

Estos aspectos sumados a los gestos faciales hacen en su conjunto la manera por la cual nos expresarnos  con un tercero , la suma de la vestimenta correcta en el momento correcto (esto no implica el uso de un traje si o si es más si a un asado de amigos en una quinta llego de traje, también dará en ese ámbito una imagen negativa), el conocimiento de las reglas de cortesías (desde las básicas a las más protocolares) generan y forman la imagen (personal) que un tercero tendrá de nosotros, es más el trillado concepto que” una imagen vale más que mil palabras “ es así y más la primera imagen (en su conjunto).

Estos aspectos a los relacionistas públicos es NEGADO pasarlos por alto (desde lo corporativo y lo personal) es más es una de las esencias base de nuestra carrera. En el caso de lo ceremonial y Protocolar la IP lo es todo, uno podrá cumplir con las reglas de ubicación de anfitrión, invitados, expositores, ubicación de emblemas, momentos de himnos, ubicación de platos y cubiertos, etc. Pero si en el caso de una acto protocolar ceremonial por ejemplo de un embajador el mismo nos recibe de bermudas, musculosa, ojotas y no higienizado es resto no se ve, es decir la IP opaco el resto y la imagen que se llevara el invitado hasta afectara la imagen de la nación que el mismo representa, este “publico” creara una imagen negativa y de dejadez de la nación en su conjunto. Con esto volvemos al primer término: “la imagen es una representación mental….”  Y es de cada uno ya que quizás otros públicos o personas se cruzaron con otro representante de la misma nación pero “en mejores condiciones” y este mismo creo otra imagen de la misma. Es por ello que con esto cerremos dos dudas: es fundamental que el RRPP sepa en lo ceremonial/protocolar llevar correctamente la IP  y por ende con el exagerado ejemplo dado es más que importante la IP del anfitrión. Si el RRPP cumple correctamente con su trabajo tendrá TODOS los aspectos mencionados desde el principio de este trabajo en cuanta para ejercer un correcto asesoramiento de IP de su cliente/empleador. Como de chico me decía mi padre: “lo cortéz no quita lo valiente” simple pero clara frase…la cortesía es un aspecto clave no solo en la imagen si no en la relación con un tercero, este término en ocasiones suena a acciones de nivel protocolar pero no es así, en una simple salida de amigos y amigas (más cuando un “amigo” está interesada por otra “amiga”) el simple hecho de dejarla pasar primero a la chica/amiga, abrirle la puerta del auto y estar atento a algunos detalles creara en ella una primera imagen positiva, es más hasta que se desarrollaron estos gestos por ahí solo mediaron muy pocas palabras, pero para ella los mismo ya marcan que por lo menos aparenta un cierto grado de educación y respeto por el prójimo…ya sumando puntos para la IP de su “nuevo amigo”. La cortesía nunca  está de más y en algunos casos es por ahí la primera acción de comunicación con un tercero y puede marcar una gran diferencia o no. Hasta este punto se podría decir que solo nos ocupamos del anfitrión, pero una correcta IP también se debe presentar en el invitado en cuestión (siempre sabiendo donde, como y cuando) el presentarse a un evento social (desde un acto ceremonial hasta un asado) y concurrir de manera no apropiada como mínimo el anfitrión lo tomara como una falta de respeto. Desde mi punto de vista y más allá de todo acto debemos cuidar de nuestra IP por el “simple”  hecho de ser también un punto de sana comunicación y respeto hacia el otro.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *