24 noviembre, 2024

Muchas personas desconocen una rama del turismo que está más relacionado a la salud y la estética que al destino en sí. El turismo médico, es una buena forma de aprovechar un viaje y a la vez operarse en un lugar en donde el cambio les sea beneficioso.

Este fenómeno global está tomando un gran auge en América Latina, por dos factores primordiales: los moderados precios de la atención y la cercanía de planetamuchos países a Estados Unidos y Canadá. Entre los países que impulsan el turismo de salud en América Latina y el Caribe destacan Argentina, Bahamas, Barbados, Brasil, Ecuador, México, Perú y Uruguay, entre otros.

Existen agencias de turismo que promocionan el viaje incluyendo no solo la estadía, alguna comida y descuentos en excursiones, sino que también aprovechan para aconsejar sobre los mejores centros de estética del país. El turista tiene la posibilidad de elegir y contactarse con el lugar para pautar una fecha y a la vez recorrer y conocer el país visitado durante sus días de reposo.

Pero no todo es color de rosa, ya que muchos médicos aprovechan el desconocimiento del turista y les prometen gastos muchos más baratos que en otros centros. Pero como el refrán dice muchas veces, “lo barato sale caro”.

El número de cirugías plásticas ha crecido notablemente en los últimos años, el problema de esta cirugía en el extranjero, es que no se puede controlar adecuadamente el postoperatorio ni los resultados definitivos, así como las complicaciones. Y mucho más negativo es si los precios bajos se deben a médicos no especialistas en cirugía estética o la utilización de materiales no aprobados.

Cirujanos confirman que muchos pacientes, realizan consultas por deformaciones faciales muy notorias, debido a una mala cirugía echa en el exterior. Aunque todo se resuelve con una intervención secundaria, el ahorro del dinero no valió la pena.

En este momento es cuando podemos remitir a una frase célebre del filósofo Kant: “Obra de tal manera que uses la humanidad, tanto en tu persona como en la persona de cualquier otro, siempre como un fin y nunca como un medio». Esta frase cobra aún más sentido cuando tenemos en cuenta que cada médico debe respetar un conjunto de reglas y principios que guían su conducta profesional, o mejor llamada deontología médica, que al parecer estos profesionales no lo tienen muy en cuenta.

Pero los que si se toman este problema de manera cuidadosa, son las embajadas de cada país, en donde recomiendan a los turistas no solo cuidarse de los robos o hurtos, sino que también aconsejan siempre ser precavido y asegurarse de las certificaciones del lugar elegido.

Por su parte Argentina se prepara para este nuevo fenómeno que ya ha hecho repercusiones en el país, cerca de 14 mil pacientes/turistas son recibidos por año en nuestro territorio con un gasto promedio de 13 mil dólares por estadía.

Miguel Cané presidente de la cámara Argentina de turismo Medico, asegura que es un mercado que se está llevando con mucho éxito y tienen planes a futuro para aumentar las divisas en el país. También notifica que han firmado convenios de ética con la OMT, y la Asociación Médica Argentina supervisa y certifica todas las actividades.

Y ustedes, ¿Se animarían a hacerse una cirugía en el exterior?

 

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