El ácido cianhídrico fué aislado por primera vez desde el tinte azul (azul de Prusia), este tinte era conocido ya desde 1704 pero su estructura molecular era completamente desconocida. En la actualidad, el azul de Prusia, es conocido como un compuesto de coordinación con una estructura compleja y una fórmula empírica procedente de la hidratación del ión complejo ferrocianuro.
En 1752, el químico francés Pierre Macquer dio un importante paso al mostrar que el azul de Prusia podría convertirse en un óxido de hierro más un compuesto volátil que podría ser empleado como reconstituyente del colorante, el ácido cianhídrico. El nuevo componente fue conocido como cianuro de hidrógeno (en estado gaseoso). En 1815 Louis Gay-Lussac dedujo la fórmula química del ácido. El radical cianhídrico: cyan proviene del griego clásico que significa azul, debido a su origen del azul de Prusia.
El ácido cianhídrico o ácido prúsico es un gas tóxico que se encuentra entre los venenos, más potentes y de efectos más rápidos. Fue utilizado en los campos de exterminio nazis, y en Estados unidos se usa en las ejecuciones en cámaras de gas.
El ácido cianhídrico, también conocido como cianuro de hidrógeno entre otros, es un compuesto químico con fórmula molecular HCN (H-C?N), altamente peligroso, venenoso, volátil e inflamable. En condiciones normales, se puede encontrar en estado gaseoso o líquido, no presenta coloración y posee un característico aroma a almendras (amargas). Es un compuesto muy soluble, se trata de una molécula polar lineal con un par de electrones sin compartir. Su punto de ebullición es de 26o y el de fusión de -13o.
Este ácido puede llegar a ser letal, pues tan sólo 300ppm presentes en el aire puede causar la muerte a una persona en pocos minutos. La gran toxicidad que presenta este compuesto es debido al ión cianuro (CN-), el cual afecta a la respiración de las células, inhibiéndola y realiza una reacción de precipitación de las proteínas de la sangre.
Es incluso más tóxico de lo que puede llegar a ser el monóxido de carbono a nivel de la respiración. En los incendios se debe tener atención, pues el gas de ácido cianhídrico puede ser producido debido a la combustión de ropa, telas de alfombras, u otros productos comunes, pudiendo inmovilizar en poco tiempo a las personas que lo inhalan.
El ácido cianhídrico puede encontrarse también, de manera natural, en algunas picas de frutas, sobre todo las que cuentan con una semilla de gran tamaño. También se encuentra presente en las almendras que presentan sabor amago. Además, algunos insectos lo utilizan como método defensivo. Fuera de la naturaleza, este ácido puede encontrarse presente en el aire que respiramos debido a los gases que emiten los automóviles, además del humo procedente de combustiones, cigarrillos, quema de plásticos, etc.
A nivel industrial el ácido cianhídrico es producido a gran escala alrededor del mundo, pues es muy usado en la industria química y en minería. Se utiliza en numerosos procesos de producción, como para la fabricación de tintes, sustancias explosivas, plásticos, etc. Este ácido se puede fabricar partiendo de la reacción que sufre el cianuro al entrar en contacto con un ácido fuerte.
El procedimiento de producción más importante para el ácido cianhídrico sintético es el de la oxidación de Andrussov, llamada así en honor a su inventor. En este proceso el CH4 (metano), reacciona junto con el NH3 (amoníaco), cuando se encuentran en presencia de oxígeno, a elevadas temperaturas (en torno a los 1200ºC), con la participación de platino a modo de catalizador.
2 CH4 + 2 NH3 + 3 O2 ? 2 HCN + 6 H2O
La energía que necesita esta reacción, es otorgada por la parcial oxidación sufrida tanto por el CH4 como por el NH3.
En el laboratorio, pequeñas cantidades de HCN son producidas añadiendo ácidos sobre sales de cianuro de los metales alcalinos, por ejemplo, cianuro de sodio:
H+ + NaCN ? HCN + Na+
Esta reacción puede producir envenenamientos accidentales porque el ácido convierte la sal de cianuro en HCN gaseoso.
Para quienes manipulen, trabajen u obtengan como consecuencia de alguna reacción este ácido, deben asegurarse de cumplir con algunas de medidas de seguridad. Algunas de ellas son:
Equipo de protección personal: Para trabajar con este producto es necesario el uso de bata, lentes de seguridad y guantes, en campanas extractoras de gases, evitando olerlo y tocarlo directamente. Por ello, dependiendo de la cantidad podría ser necesario el uso de un equipo de respiración, ropa de protección químicamente resistente y detectores. El personal debe estar debidamente capacitado en los primeros auxilios necesarios y nunca trabajar solo. Para trasvasar pequeñas cantidades debe usarse propipeta.
Riesgos de fuego y explosión: Los recipientes que contienen al HCN pueden romperse violentamente al someterse al calor. Lo mismo sucede con las disoluciones acuosas, pues al calentarse se genera cianuro de hidrógeno. Además de la toxicidad, el cianuro de hidrógeno presenta otro peligro, la polimerización a pH entre 5 y 11, la cual resulta violentamente explosiva, en especial si el material se encuentra en recipientes cerrados. Esta reacción se favorece con la presencia de agua y calor.
Riesgos a la salud: Por ser sumamente venenoso, puede ser fatal si se inhala, se ingiere o es absorbido a través de la piel. Es un veneno protoplasmático no acumulativo, es decir puede ser eliminado totalmente. Se combina con enzimas sanguíneas que regulan la transferencia de oxígeno en la membrana celular. Por lo que, si el cianuro no se elimina rápidamente, se presenta la muerte por falta de oxígeno en las células. Los síntomas de envenenamiento por cianuros incluyen cansancio, adormecimiento, dolor de cabeza, pulso rápido, náusea y piel enrojecida. Una exposición más prolongada causa vómito, respiración dificultosa seguida de inconsciencia, paro respiratorio y muerte. Si la exposición es severa, la inconsciencia es inmediata. Por ello es necesario que las personas que trabajan con este compuesto porten detectores adecuados.