25 noviembre, 2024

De acuerdo a los objetivos a los que respondan los eventos se pueden clasificar en distintas categoría, de las cuales las más representativas son sociales, empresariales, de entretenimiento, deportivos, políticos, religiosos, entre otros.

Pero por generalización los concentramos en dos tipos, los eventos para responder objetivos de las personas como individuos, los sociales (el típico ejemplo de una boda o un barmitzvá) y los eventos que pretenden responder a necesidades de las organizaciones, el caso de los corporativos o empresariales.

Los eventos empresariales estimulan a los diferentes miembros de una organización a reunirse como grupo y proporcionan un interés especial al ciclo de vida de una compañía.

El auge de los eventos comenzó en primer lugar en las empresas con el propósito de innovar resultando cada vez más sofisticados. Su objetivo era contagiar a los invitados de que “juntos se puede”, es decir que la idea no era solo de festejar sino de involucrarse y sentirse participes del evento. El invitado se sentiría permanentemente servido y atendido, hasta sentirse completamente mimado.

He aquí algunos consejos para organizar eventos exitosos:

  • Renovar, innovar y diferenciarse de anteriores eventos. Cada evento es único e irrepetible.
  • Priorizar las relaciones interpersonales, cuidando los detalles y evitando molestias entre los invitados.
  • No establecer diferencias, todos deben sentirse involucrados. Se debe pensar eficazmente quienes serán los participantes, y perfil de cada uno de ellos.

Estos tipos de eventos tienen una transcendencia publica y las empresas los plantean como una herramienta dentro de su estrategia de marketing para aumentar sus ventas, lanzar o relanzar un producto, crecer y desarrollarse en el segmento de mercado al que apuntan, o simplemente para agasajar a su público interno para que mejoren el rendimiento laboral y así, formar grupos de pertenencia.

Hay diferentes tipos de eventos empresariales algunos que duran dos horas y otros pueden llegar a alcanzar hasta 7 días dependiendo de la magnitud y el enfoque al que apunte la empresa.

Al considerar los eventos como herramientas de comunicación basamos toda la planificación de los mismos en el manejo  del mensaje a comunicar para poder llegar a cumplir con las metas planteadas, por eso no solo es imprescindible tener claro todos los objetivos, explícitos e implícitos, sino también definir el concepto del mensaje y articularlo en todo el desarrollo del evento, de esta manera alcanzaré con éxito mi evento empresarial.

Espero que haya sido de su agrado leer mi trabajo y le sirva no solo como información sino también para entender que la organización de un evento es una tarea dinámica y bastante compleja, y a medida que siga aumenta la demanda para dicho servicio seguirá creciendo y actualizándose en tendencias y virtudes.

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