Suena a las doce la marcha Peronista en el curioso restaurante ubicado en la calle Ángel Justiniano Carranza al 2225 en el barrio de Palermo. Un restaurante que llama la atención de aquellos turistas interesados en la cultura y política argentina, y también en aquellos nostálgicos o aficionados al Peronismo. Con marcada tendencia nacional, popular e ideológica no solo en la ambientación del lugar sino en la curiosa carta gastronómica, el Restaurante Perón, Perón ofrece una experiencia completa simulando un verdadero viaje en el tiempo, con imágenes y fotografías muchas que se encuentran en la memoria colectiva y otras inéditas rinde culto no solo al General y ex presidente Argentino sino también a Eva Perón que está también presente, hay un altar en su honor, con flores de plástico, imágenes y estampitas en el centro del restaurante. La decoración está llena de detalles, un reloj donde se fichaba la hora de entrada y salida de las fábricas, que está parado a las 20:25 horario en que murió Evita y tiene la tarjeta del trabajador 001 por Perón que fue “el primer trabajador” según el movimiento Peronista. El menú es diverso y bastante provocativo, la clásica Milanesa con papas fritas se piden con el nombre de “dos potencias se saludan” por la histórica frase que el “mono Gatica” utilizo al conocer al General, los tragos para mujeres están agrupados con el titulo ley 13.010” La ley que en 1947 les permitió a las mujeres sufragar. El flan quinquenal es el postre recomendado de la casa.
Este restaurante temático bastante peculiar por su impronta política ofrece una experiencia diferente, pero no es el único en la ciudad de Buenos Aires, en el Barrio de Recoleta también el Bar “un café con Perón” es un punto de encuentro donde es inevitable tomarse una fotografía con el General ya que en una de sus mesas se encuentra una estatua del ex Jefe de estado, tan real que sus visitantes no pueden evitar la típica fotografía sentados con él en la mesa. Vale destacar que hasta el 2015 esta fue la única estatua de Perón en la ciudad porteña. La ambientación también llena de imágenes es un especie de museo, y está ubicado en un lugar histórico, en la planta baja de la antigua casona que fue parte de la residencia que hasta 1955 ocupo el matrimonio en Austria 2395. En donde se encontraba el palacio Unzué, Lugar de vital importancia, fue la última residencia de Eva Perón, antes de su fallecimiento el 26 de Julio de 1952. El bar forma parte del Instituto Nacional Juan Domingo Perón y es una de las curiosidades que tiene Buenos Aires para ofrecer, que invita aquellos interesados en la cultura Argentina a formar parte de ella aunque sea unas horas, y a conocer una parte de la historia del país con sus hechos y excentricidades.