A partir de la década del 1880 aparecieron los primeros centros termales destinados a la rehabilitación. Así surgió en Salta el hotel Casino Termas de Rosario de la Frontera, fundado por el español Dr. Antonio Palau, el primero del país que incluyo todo el lujo y el confort de aquella época, el restaurante contaba con cubiertos de plata y porcelana inglesa y había obras de arte que habían sido traídas desde Europa. Atraídos por las promesas curativas del lugar, los visitantes llegaban en tren hasta Tucumán y luego llevados en carretas hasta el hotel, hasta que en 1886, y con la visita del Presidente Sarmiento, un ramal del ferrocarril se extendió a pedido de los propietarios hasta la estación Los Baños, fundada para el hotel. Pero con la llegada del peronismo todo eso se perdió por diversos motivos. Decae el auge termal de Rosario de la Frontera y pasa a ser administrada por el gobierno de Salta en 1948. En la ciudad tienen 9 tipos de aguas termales y se puede practicar turismo de aventura, cabalgata o trekking hasta la Cara Oculta, disfrutar de las vistas a una capilla de piedras, la vieja estación Los Baños, una piscina de aguas termales construida con piedras volcánicas. Otra atracción es la caminata a la Gruta de la Virgen de la Montaña. Se llega yendo de Tucumán a Salta (o viceversa), por la Ruta 9. Y desde Santiago del Estero por la Ruta 34.
El trazado de los ferrocarriles dio impulso al desarrollo de los principales centros turísticos del país.
En 1913 nace en la provincia de Buenas Aires un hotel termas, cuando una compañía belga proyecto un balneario llamado Ostende, sin embargo las fuertes sudestadas y los movimientos incontrolables de montañas de arena de esa época hizo que el hotel permaneciera bajo las dunas. La compañía abandona el proyecto pero finalmente fue recuperado y bautizado Viejo Hotel Ostende. El lugar es frecuentado por escritores y lectores que se dejan llevar por la tranquilidad y misterios del hotel. Antoine de Saint- Exupery, el autor de “ El principito” se alojo en la habitación 51 y es conservada tal como lo dejo. Se puede ir desde Capital Federal por la Autovía Nº2 hasta la localidad de Dolores. Luego empalmar con la ruta 63 hasta Esquina de Crotto y tomar la ruta interbalnearia Nº 11 hasta Gral. Conesa, de allí se debe tomar la ruta 56, pasar por Gral. Madariaga y continuar por la Autovía 74 hasta Rotonda de Pinamar, doblar por la rotonda hacia Villa Gesell hasta la primera Rotonda que es la de Ostende. En caso de optar por vía aérea, los vuelos parten del Aeroparque Jorge Newbery de la ciudad de Buenos Aires llegando al Aeródromo Villa Gesell, durante los meses de enero, febrero y marzo. Los turistas ahi frecuentan las playas de Pinamar, la Playa de Valeria del Mar, el Balneario Enrico, a 5 km se encuentra la Reserva Natural y a 4 km se encuentra el Parador Neruda.
De la mano del ferrocarril se inaugura en 1938 el Gran Hotel Casino Termas de Reyes en Jujuy. Creencias indígenas atribuyen su nombre a los Reyes del Imperio Incaico, debido a que se encontraba en el trazo del camino de los Incas, cuando llegaron los conquistadores españoles lo bautizaron con el nombre de Termas de los Reyes. Deja de funcionar el casino y hotel durante el gobierno de Peron. En 1958 es inaugurada por segunda vez como hotel Termas de Reyes. En el mes de marzo de 1999 mediante una licitación publica se realizo la privatización del hotel, quedando como adjudicataria la empresa jujeña LAS ALMONAS S.A. Para llegar al hotel puede ser arribando en el Aeropuerto Internacional Dr Horacio Guzmán que queda a 30km de la ciudad de San Salvador de Jujuy y a 50 km del Hotel, sino por auto recorriendo la ruta nacional nº 9 para luego desviarse por la ruta provincial nº 4, accediendo primeramente a Villa Jardín de Reyes pasando por Guerrero para luego recorrer un tramo final de 4 km totalmente asfaltado hasta llegar al hotel. Atractivos imperdibles: aparte de disfrutar de las aguas hipertermales que brotan de las fuentes subterráneas, se puede hacer ecoturismo o turismo aventura por el circuito de las Lagunas de Yala, pescar y/o visitar el criadero de truchas, o hacer la excursión del Camino del Inca.
Aun con el avance de los ferrocarriles, para llegar al Hotel Correntoso no era fácil, se debía hacer varias combinaciones de ferrocarriles, autos y barcos o hidroavión. Sumando la tragedia de la familia Capraro, decide tomar las riendas el hijo y el hotel acrecentó su prestigio internacionalmente, teniendo su época de mayor esplendor en 1936. El resolvió construir el primer edificio de mampostería. Los extranjeros enloquecían por las truchas que se pescaban en la desembocadura, y la elite local elegía con frecuencia este destino, el presidente Humberto Illia lo elegía como lugar de descanso, Sandro grabó aquí la película “Siempre te amaré” y en el libro de visitas quedó asentado el paso de Isabel Sarli y Armando Bo. Tras cambiar de manos y con un período de abandono, el Correntoso reabrió en 2003 con Laurence al frente. Superaron la erupción del volcán Puyehue de 2011 y siguieron creciendo. Hoy el hotel tiene 49 habitaciones con vista panorámica, restaurante gourmet, wine bar y otro espacio gastronómico, Puerto Correntoso, más informal, con especialidades al horno de barro y ubicado junto al muelle que originalmente sirvió de desembarco para el almacén de ramos generales de principios de siglo. El lugar ofrece actividades como ciclismo, senderismo, kayaking, esquí, pesca. También se recomienda visitar el Parque Nacional Los Arrayanes, el lago Nahuel Huapi, el rio Correntoso, el lago Espejo Grande, la aerosilla Bayo. Se puede llegar en avión arribando en el aeropuerto de San Carlos de Bariloche y solicitar un transfer desde el aeropuerto o llegar con el auto desde Bariloche por la ruta nacional 40.