Los infortunios laborales que se producen en la tarea diaria de los trabajadores es consecuencia, sin duda, del fracaso de las medidas de prevención adoptadas, esto trae como consecuencia un aumento en los costos humanos y materiales.
Las técnicas preventivas que debemos aplicar para proteger al trabajador deben ser llevadas a cabo por especialistas o expertos, esto nos garantizará condiciones aceptables en los ambientes laborales.
En muchas ocasiones encontramos condiciones de trabajo donde el aire se encuentra contaminado y el calor o el frío afectan notoriamente al trabajador, ya sea este industrial o en una simple oficina. Allí empieza esta materia a brindarnos la ayuda necesaria para actuar sobre las CyMAT. Nuestra tarea será entonces preventiva y correctiva, pero tengamos siempre presente que la presencia del especialista es fundamental.
El objetivo es entonces, pararnos frente a una actividad laboral y poder observar las condiciones ambientales determinando la mayor cantidad de riesgos presentes relacionados a las condiciones ambientales del puesto de trabajo y obrar en consecuencia.
Sin duda que es sabido de la importancia de contar con aire limpio en el ambiente de trabajo. Los distintos procesos de elaboración hoy en día, requieren de un creciente número de sustancias y preparados químicos, algunos de ellos de elevada toxicidad. Su empleo genera la posibilidad que estén presentes en el lugar de trabajo en concentraciones tales que exceden los niveles de seguridad, ya sea en forma de nieblas, gases, vapores o partículas de distintas dimensiones. Los ambientes de trabajo incómodos e inseguros también se generan por una carga térmica elevada o muy baja.
La protección del trabajador la puedo lograr con un adecuado diseño y una eficaz ventilación. Es fácil de observar que con esta actividad estoy dando al trabajador el confort necesario para la realización de la tarea, que sin duda será reflejado en el rendimiento final.
Cada sustancia presente en aire está asociada a un riesgo potencial sobre el trabajador, que está establecido por su valor límite o umbral. Diferentes son las denominaciones utilizadas por los países para referirse a ellos como ser Concentración Máxima Permisible (CMP), Valor Límite, Valor Umbral, TLV, etc.
Para adoptar un criterio común aquí utilizaremos el concepto de TLV establecido por la ACGIH (American Conference of Governmental Industrial Hygienists) de los EEUU ya que la consideramos como una referencia a nivel mundial en este aspecto. Este organismo en forma anual efectúa correcciones a las tablas vigentes y generadas por nuevos conocimientos de toxicidad, con la finalidad de reducir cada ves más las concentraciones adecuadas. Por qué esto debe ser así?. Muy sencillo. Porque las TLV están hechas para ser usadas en la práctica de la higiene como guía o recomendación en el control de los riesgos potenciales a la salud, NO SON UNA LINEA DEMARCATORIA ENTRE CONCENTRACIONES SEGURAS Y PELIGROSAS NI INDICES RELATIVOS DE TOXICIDAD. Este concepto tengámoslo presente a cada instante.
VENTILACION
En general podemos decir que se utilizan dos sistemas de ventilación:
- Sistemas de impulsión: se impulsa aire al lugar de trabajo.
- Sistema de extracción: eliminan contaminantes del lugar de trabajo manteniéndolo limpio.
Se debe tener presente que un programa completo de ventilación debe incluir a ambos sistemas. Además que la cantidad de aire que se extrae de un local debe ser igual a la cantidad que se impulsa al mismo, de lo contrario se pueden generar situaciones de presión más bajas o más altas que la atmosférica. Habrá situaciones que yo deseo generar esta diferencia de presión, por ejemplo en un quirófano, donde es conveniente que exista presión positiva (mayor que la atmosférica) para evitar el ingreso de agentes biológicos al mismo.
Otra forma habitual de clasificar la ventilación es según se realice por medios mecánicos o en forma natural.
En lo que respecta a la ventilación mecánica (o forzada) el aire es extraído o inyectado en los locales de trabajo por medio de ventiladores, sopladores, etc (es decir, por medios mecánicos)
La ventilación natural de locales se realiza por medio de una renovación del aire que se produce por la circulación a través de aberturas, chimeneas, cerramientos, fisuras, etc.
El movimiento del aire se produce por diferencias térmicas y de presión de origen natural o propias del proceso que se está ejecutando.
Al momento de decidir el sistema de ventilación a utilizar existen innumerables factores que se deben tener presente para su diseño. Por ejemplo, entre otros factores, nosotros podemos encontrar fuentes de generación de calor o procesos fríos, en un caso se puede aplicar una u otra, pero en los procesos fríos de generación de contaminantes es necesario utilizar un sistema de ventilación mecánica.
A su vez la ventilación natural puede ser general o localizada. Comúnmente la natural localizada se emplea en procesos calientes a través de campanas suspendidas o chimeneas.
La ventilación mecánica general se realiza a través de impulsores o extractores de aire con o sin conductos de aspiración o de distribución.
Cuando se utilizan los sistemas de extracción general para control térmico, el aire debe ser el adecuado a la temperatura esperada y recirculado, mientras que si se realiza dilución, la cantidad de aire que se utiliza para la mezcla debe ser tal que lleve la concentración del contaminante a los valores permitidos.