Para el servicio de transporte de mercancías en carretera, las agencias de transporte y empresas de logística utilizan varios tipos de camiones, según la ruta y las características de la mercancía que transportan.
– Tipos de camiones
El camión articulado es un medio de transporte que une dos o más estructuras a través de un punto, dentro de esta categoría existen el trailer y el tractocamión, normalmente de grandes dimensiones.
El camión de contenedor de carga es el más utilizado en el transporte internacional. Está concebido para transportar contenedores que mantengan la mercancía seca en perfectas condiciones, según las certificaciones y normas ISO.
El camión tanque es el que se utiliza para transportar todo tipo de substancias líquidas, como puede ser combustible o leche, y consiste en una cabina con una cisterna detrás.
El tren de carretera es un conjunto de vehículos unidos entre sí. La condición es que la parte delantera es un camión que puede, o no, estar unido con las otras cajas que se añaden detrás y se utiliza para transportar grandes cantidades.
El camión plataforma cada vez es menos común, dado que carece de plataformas laterales. Se utiliza para transportar determinadas mercancías de gran volumen y peso.
El camión blindado es un vehículo que se utiliza para el transporte de dinero o bienes de gran valor, y lo utilizan empresas de seguridad privada. Consta de una caja cerrada que está blindada para evitar ataques.
El camión frigorífico está concebido para el transporte de mercancías refrigeradas o congeladas, y se compone de una cabina y una caja isotérmica con capacidad de regularse a una determinada temperatura.
También hay una gran variedad de contenedores que a continuación vamos a detallar para cada tipo de tarea sirve cada uno.
Contenedor común o Dryvan: Esta disponible para cualquier carga seca normal, como por ejemplo bolsas, pallets, cajas, tambores y en sus versiones más amplias tabaco y carbón
Contenedores refrigerados integrales o Reefer: con equipo propio de generación de frio. Diseñados para el transporte de cargas que requieran temperaturas bajas o bajo cero constantemente, como, por ejemplo, carnes, pescados, lácteos.
Contenedores insulados phortole o Conair: tradicional, sin equipo de frio. Ideal para transportar cargas que necesiten frio constante pero no bajo cero, como frutas o lácteos.
Contenedores open top: presentan el techo removible de lona, permitiendo la carga y descarga superior, diseñado para transportar cargas pesadas y de amplias dimensiones, tales como maquinarias pesadas, planchas de mármol, etc.
Contenedor Flat rack: con terminales fijas o rebatibles sin laterales, exclusiva para cargas de grandes dimensiones, como maquinarias, tuberías.
Contenedor granelero: con tomas superiores y descarga por precipitación, revestidos especialmente. Permiten transportar granos, semillas, malta.
En definitiva, las empresas de logística ofrecen, hoy, en el transporte mundial una gama de vehículos y contenedores adaptados a las distintas necesidades de cada cliente.