La noticia es que la fuerza aérea china, con dos aviones caza Sukhoi Su-30, forzó a descender una aeronave norteamericana WC-135 Constant Phoenix la cual sobrevolaba espacio aéreo chino; los mismos denuncian que la nave no respondía a los llamados de alerta por infringir los límites permitidos y los infractores aluden que no fue así y que las tácticas chinas fueron excesivas y peligrosas. Todo esto contrajo problemas diplomáticos entre ambas naciones.
Ahora la pregunta del millón, ¿qué hace una aeronave norteamericana sobre espacio aéreo chino? La aeronave, WC-135 Constant Phoenix, avión de reconocimiento de armas nucleares según la información emanada de la fuerza aérea de estados unidos, se encontraba sobre aguas internacionales controlando el movimiento armamentista nuclear chino por la firma de tratados en la ONU para el desarme nuclear. Por su parte, China manifiesta que EE.UU se entromete en la lucha diplomática que sostiene China en la zona por los límites marítimos.
¿Cuánto de todo esto es verdad?
Lo que no es novedad es la eterna rivalidad entre ambas naciones, pero inicialmente era quizás por la ideología colonizadora de ambos; en el presente las guerras son de otro estilo, financieras, recursos energéticos, cibernéticas. El trasfondo de esto – que no menciona EE.UU – es que China es el principal acreedor y no quiere salir del primer puesto en el comercio internacional, y entre sus clientes se encuentran los países de la zona, considerada vital para el comercio internacional debido a que por estas aguas transitan al año mercancías valoradas en más de 8 mil millones de dólares.
Deberíamos ver de la zona que se disputa. Desde 2012, China ha incluido estas islas como parte de sus «intereses nacionales básicos». Por su parte, Vietnam rechaza la versión histórica china alegando que su vecino nunca había reclamado la soberanía sobre las islas antes de los años 40, y afirma que tienen documentos que prueban que desde el siglo XVII ellos han gobernado las islas. Mientras tanto, Filipinas invoca su proximidad geográfica como base principal de su demanda.
Finalmente, Malasia y Brunei también reclaman una parte que dicen está dentro de sus zonas económicas exclusivas definidas en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982. Taiwán reclama lo mismo que China.
El conflicto de intereses entre China y EE.UU. mantiene en tensión la zona. Por un lado, China reclama lo que considera le pertenece por derecho histórico, es decir, 80 por ciento de las aguas del Mar Meridional, los islotes, arrecifes y rocas, lo que equivale a casi tres millones de kilómetros cuadrados. Por otro lado, EE.UU. insiste en patrullar el Océano Pacífico bajo el pretexto de garantizar en tránsito marítimo y controlar el movimiento armamentista.
De acuerdo con las leyes marítimas internacionales, el país que ostente la soberanía de cada isla dispone de los 370 kilómetros de las aguas que la rodean y los recursos existentes en ellas y en el fondo. El resto de las naciones en disputa no quieren ceder un espacio que también consideran suyo.
Y la más importante de las razones: el Interés geopolítico. El Mar de China Meridional tiene más de 200 islas pequeñas, agrupadas en cinco bloques: Paracelso, Spratly, Pratas, Macclesfield y Scarborough. Además, alberga importantes recursos naturales y podría contener también gas y petróleo. De acuerdo con las estimaciones del Servicio Geológico de EE.UU., podría tener miles de millones de metros cúbicos de gás natural, lo que equivaldría a entre el 60 y 70 por ciento de los hidrocarburos de la zona.
En conclusión, se pone de manifiesto que los países en cuestión se encuentran en permanente control y alerta por los movimientos militares; la eterna ideología conquistadora imperialista de Estados Unidos, por su poder bélico e intereses comerciales con los países de la zona con la venta de armamento y apoyo militar, lo que hace por interés, no solo porque esas aguas son paso obligado para negociaciones marítimas, sino también por el petróleo que se encuentra en la plataforma marítima, la cual provoca el conflicto por el que están litigando los países limítrofes a esa zona, lo que ha hecho también intervenir a la ONU para evaluar quién de estos toma posesión de este espacio, extendiendo su lecho marítimo.
Fuente:
http://www.bbc.com/news/world-asia-china-39971267