Dentro del comercio internacional este tipo de estrategia la encontramos en grandes corporaciones, debido que los mercados internacionales están modificando su estructura a niveles organizacionales y las grandes empresas están reduciendo sus recursos humanos y materiales para optimizar costos teniendo en cuenta que el comercio internacional es el intercambio de bienes como productos y servicios entre países alrededor del mundo. En Argentina el Comercio Internacional, para el empleado, el puesto laboral es más firme debido a las fuerzas sindicales que no permiten el despido directo, por lo tanto las empresas toman el riesgo de comenzar a reducir personal a través de esta técnica llamada Mobbing o acoso laboral, estudiada por la Psicología Laboral que es la encargada de lidiar entre los intereses de la organización y los intereses de las personas, previniendo y promoviendo la salud mental.
Con este método la persona o grupo de personas reciben una violencia psicológica injustificada a través de actos negativos y hostiles en el trabajo por parte de sus compañeros, superiores, de forma sistemática y recurrente, durante un tiempo prolongado, a lo largo de meses e incluso años.
El mobbing puede desembocar en enfermedad profesional, es decir, derivado del trabajo, aunque tanto autoridades como empresas se muestran muy reacias a admitirlo como tal.
Consecuencias psicológicas y laborales del mobbing
Lento deterioro de la confianza en sí misma y en sus capacidades profesionales por parte de la víctima.
Proceso de des valoración personal.
Desarrollo de la culpabilidad en la víctima. Creencia de haber cometido verdaderamente errores, fallos o incumplimientos.
Somatización del conflicto: enfermedades físicas.
Insomnio, ansiedad, estrés, irritabilidad, hipervigilancia, fatiga, cambios de personalidad, problemas de relación con la pareja, depresión.
Inseguridad, torpeza, indecisión, conflictos con otras personas e incluso familiares. Bajas laborales que el acosador suele aprovechar contra el trabajador.
La recuperación definitiva de la víctima suele durar años y, en casos extremos, no se recupera nunca la capacidad de trabajo.
Una empresa también puede ser víctima de una demanda judicial por falso mobbing, quedar expuesta en su imagen y asumir costos de los que la parte actora está exenta debido al beneficio de gratuidad con el que litiga.
