La planificación logística tiene mucha más importancia a la hora de ahorrar costos. Esto solo sucede si se trata como un medio y no como un fin. Tratar la logística como un fin implica una visión de que se trata del proceso de transportar y aprovisionar mercancías. Con una visión distinta, como medio de ahorro de costes, se puede planificar de forma más óptima.
En el otro extremo están las compañías que, por falta de conocimiento, no aplican estrategias de ahorro que podrían proporcionarles mayor liquidez en un contexto en el que cualquier medida de reducción de costes es importante para ganar competitividad. Podemos mencionar cuatro ámbitos principales en los que se pueden encontrar oportunidades de reducción de costes sin que por ello sufra la calidad de servicio:
1. El diseño del catálogo de productos: Un catálogo reducido hace que se logre una mayor productividad y rentabilidad. La eliminación de las compras de productos de baja rotación permite conseguir una mayor economía de escala a la hora de realizar las compras y un descenso del stock al centrarse la compañía solo en productos que vende con rapidez. Además se reduce el espacio en el almacén y la necesidad de personal que gestione ese catálogo.
2. La elección de proveedores de aprovisionamiento de materias primas: la negociación a la hora de realizar las compras de materias primas a proveedores es clave. Gestionar correctamente a los proveedores en este sentido puede ahorrar muchos disgustos y fuentes de pérdidas económicas. Una forma de hacerlo es imponer penalizaciones por no cumplimiento del servicio, de manera que puedes reducir los riesgos.
3. La gestión del almacén: ¿es posible externalizar la gestión del almacén? no solo es posible sino conveniente, pues una mayor especialización permite rentabilizar las instalaciones y controlar los costes.
4. La elección de proveedores de transporte: la selección de buenos proveedores de transporte es el último paso para conseguir una gestión logística óptima y un buen servicio al cliente. Habrá que tener en cuenta si el transporte es nacional o internacional, negociar bien los precios y los servicios y examinar las rutas de transporte. Una buena selección de proveedores de transporte permite reducir los costes en este ámbito en un 25%.
Claves para reducir costes en logística
Como es posible reducir costes de los procesos de transporte sin que éstos pierdan eficiencia?. Para ello, el factor tecnológico es determinante, porque la tecnología se trata de una pieza fundamental para optimizar los procedimientos en materia de logística. En ese sentido, es esencial buscar a un proveedor tecnológico que cuente no sólo con la infraestructura necesaria, sino que tenga la capacidad de ofrecer soluciones alineadas a la competitividad del negocio.
El coste logístico de los productos puede representar entre un 20 o 30% del coste total de la mercancía.
Las operaciones logísticas constituyen una parte sustancialmente importantísima en cuanto a las decisiones estratégicas del negocio, que implican elegir bien el mercado y desarrollar índices eficientes de medición de gastos. Por este motivo, la tecnología se trata de una pieza fundamental de optimización, pudiendo observarla en ejemplos muy diversos como la utilización de GPS: Gracias a ellos es posible tener visibilidad en línea y trazabilidad tanto del transporte como de la paquetería y, por lo tanto, extraer información inmediata del estatus de los artículos tanto en ubicación como en tiempo, contribuyendo a la satisfacción por servicio al cliente.
Claves que pueden contribuir a reducir los costos en logística para la empresa:
1. Formación de alianzas estratégicas: Éste fenómeno se ha dado en llamar creación de clusters, los cuales son grupo de empresas interrelacionadas que trabajan en un mismo sector industrial y que colaboran estratégicamente para obtener beneficios comunes.
2. Trazabilidad. La definición de este término alude a la serie de procedimientos que permiten seguir el proceso de evolución de un producto en cada una de sus etapas. En el campo logístico, la información del producto que indique todo el historial por el que ha ido circulando es un exigencia demandada por el consumidor, debido tanto a aspectos legales como a aquellas empresas que buscan ofrecer a sus clientes un valor añadido.
3. Aprovechamiento de las tecnologías móviles. Los beneficios de la adopción de aplicaciones y herramientas tecnológicas especialmente orientadas a tabletas y Smartphone son cada vez más notorios y diversos. Este tipo de tecnologías permiten obtener toda la información que el operador precisa, lo que redunda en la mejora de la productividad y la reducción de los costes operativos y de personal.
4. E-comerse: Internet lo ha cambiado todo, desde la manera de concebir modelos de negocio, al diseño de estrategias de marca mediante el marketing de contenidos o la medición a través de la analítica web, pasando por la creación de comunidades de usuarios que generan opinión, debate añadiendo valor a los productos. En el campo logístico son muchas las compañías dedicadas a la paquetería y distribución que proporcionan un valor añadido de trazabilidad de sus productos a los clientes mediante esta metodología. Por una banda, el cliente tiene acceso a un espectro mucho más amplio de productos y a una completa comparativa de precios en la red.
5. Utilización de técnicas avanzadas de reducción de costos como el Lean Management. Esta estrategia se enfoca a reducir todas las tareas que no aportan valor añadido al usuario, eliminando así el desperdicio y por lo tanto, el gasto.
Es fundamental para las empresas, en su búsqueda por la mejora logística, reconocer la experiencia del proveedor. Aquel que sea capaz de integrar redes, dispositivos móviles, aplicaciones y tecnología de administración de acuerdo a los niveles de adopción de cada compañía, y adaptar toda la integración a las estrategias de incremento de productividad, rentabilidad y eficiencia.