El día de ayer se conoció que el fiscal platense Fernando Cartasegna, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 Delitos conexos con Trata de Personas y Pedofilia y que investiga a las mafias policiales, fue atacado, atado y herido en su despacho oficial.
El jefe de la departamental La Plata, comisario Diego Bravo, fue alertado de esta situación por el mismo fiscal, una vez liberado de las ataduras el procurador general ante la Suprema Corte de Justicia bonaerense, Julio Conte Grand, afirmó que a Cartasegna «le dejaron escrito con azúcar la palabra Nisman».
El fiscal fue inmediatamente trasladado al Hospital Italiano de La Plata y esta mañana fue dado de alta. En sus declaraciones para radio «El Mundo» sostuvo que se encuentra bien y que debe tener mucha prudencia para comunicar el hecho ya que, la fiscal a cargo de la causa le pidió cautela ante la gravedad del asunto.
Dijo también que quería «llevar tranquilidad a la gente» que lo quiere o que se solidariza. «Estoy lento para hablar, pero bien», sostuvo. Luego agrego, «No sé qué fue lo que pasó, me han dado mucho medicamento y no puedo reconstruir lo que pasó», reiteró. «No entiendo qué fue lo que pasó, estoy muy perdido, fue todo muy confuso. No quiero decir algo y después contradecirme», insistió.
Este fue el tercer ataque contra el funcionario judicial en cuatro días.