Ayer por la noche 59 misiles crucero Tomahawk, provenientes de buques estadounidenses USS Porter y USS Ross, impactaron contra la base aérea siria de Shayrat. Este es el primer ataque que Washington lleva a cabo contra las fuerzas del gobierno sirio desde que comenzó la guerra en ese país hace seis años.
Además de las víctimas mortales confirmadas, el ataque dejó decenas de heridos y destruyó la base aérea, que es la segunda más importante de las fuerzas gubernamentales sirias, según informó hoy en un comunicado el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), citado por EFE.
Las fuerzas armadas sirias han indicado en un comunicado que el ataque de EEUU ha causado «siete muertos, nueve heridos (entre ellos civiles) e importantes daños materiales». En las instalaciones militares había aviones, armamento de defensa aérea, viviendas de oficiales y un almacén de combustibles, aseguran.
Desde el gobierno de los Estados Unidos afirman que la decisión se tomó como respuesta al bombardeo con armas químicas de Khan Shaykhun, en el norte de Siria, donde murieron al menos 70 personas y mas de 200 resultaron heridas.
Según se informó, el comando estadunidense le notificó al gobierno de Rusia que realizaría la incursión. Los medios rusos afirman que nueve aviones sirios resultaron destruidos durante el bombardeo.
El gobierno de Al Asad niega haber usado armas químicas y rechaza toda responsabilidad en lo sucedido en Idlib. La televisión estatal siria calificó el ataque de EE.UU. como un «acto de agresión».
Por el momento, ni la ONU ni la Organización para la Prohibición de Armas Químicas confirmaron el tipo de agente químico que se empleó en Khan Shaykhun , aunque Médicos Sin Fronteras (MSF) informaron que su personal atendió a pacientes con síntomas compatibles con la exposición a una sustancia como el gas sarín.