El estudio de mercado implica realizar un relevamiento de diversas zonas en las que se encuentren los diferentes atractivos turísticos, y evaluar qué tiene en particular para ofrecer cada uno de ellos y por supuesto, también sus alrededores, ya que en turismo a la hora de evaluar la “plaza” no alcanza solamente con evaluar el lugar, hay que hacer también analizar, qué es lo que el espacio en su conjunto tiene para ofrecernos y el tipo de accesibilidad al mismo, (por ejemplo: aunque sea un destino soñado, si para llegar hay que caminar 3 horas se reducen instantáneamente las posibilidades para muchos clientes).
Debemos abocarnos a la búsqueda de nuevos destinos, cuyos precios deberán ser acordes al servicio ofrecido: que estén acordes al target de pasajeros que nos eligen, sus demandas, requerimientos y por supuesto que tanto el servicio como la atención sean de la mejor calidad, para ello tendremos que tener en cuenta las necesidades de nuestros clientes y sus gustos.
Estos dos puntos explicados reflejados anteriormente dan cuenta del análisis de marketing que realizan las empresas para la selección de un buen producto. Se puede decir entonces, que tanto la “Plaza” como el “Precio” son dos factores sumamente importantes para la definición del nuevo producto.