El Mercosur incluida Argentina, sufren de forma directa las consecuencias de la economía actual por esto deben luchar por la inserción optima en este marco económico y de comercio internacional. La necesidad de aumentar la producción y los rendimientos por medio de la aplicación de las tecnologías (mecanización, semillas seleccionadas, riego, fertilizantes químicos y etc.), también la reorganización de las superficies agrarias y una expansión en los cultivos destinadas a satisfacer las necesidades de la demanda mundial, lleva a mejorar las relaciones internacionales, con la consecuencia de que puede provocar un desabastecimiento local.
Por lo tanto, es fundamental que cada país del Mercosur logre su expansión agrícola, su crecimiento económico y la conexión con otros estados. Que los productores logren focalizarse en una producción eficiente buscando nuevas alternativas para la renovación de las tierras, que se logre inversiones eficientes para la mano de obra y mejorar las condiciones laborales de los trabajadores.
Actualmente, la economía también depende del campo así que es muy necesario estar a la altura de la demanda mundial sin descuidar la demanda local, aunque gran parte de la producción está destinada a la exportación porque es lo que da más rentabilidad.
Por último, debemos diferenciar los actores que intervienen en este sector, están las grandes industrias focalizados únicamente en la exportación y las medianas y pequeñas industrias dedicadas al área local, en todos los casos deben ser respaldados para el funcionamiento constante de la agricultura.