Fin de semana la juventud se prepara para salir a divertirse, el lugar elegido un Boliche la adrenalina, alcohol, música fuerte y luces parpadeantes, un coctel infaltable en cualquier lugar de nuestro país. Pero bien se toma conciencias si esto trae algún daño perjudicar para la salud en este informe se tratara de ilustrar algunos caso o enfermedades que pueden ser contraídas por el efectos de las luces parpadeantes y otros agregados.
En este 1er relato le sucedió a una joven llamada Alina Fernández, de 19 años, que se divertía en un local bailable, comenzó a sentirse mal. «No entendía bien lo que me pasaba; fue algo que nunca antes me había sucedido. Tenía la sensación de que todo se movía lentamente; pensé que era porque había tomado algo con alcohol», comentó la joven. «Cuando me desperté, ya estaba en mi casa. Al otro día, me hicieron los estudios médicos. Los especialistas dijeron que no tengo nada grave. Pero me advirtieron que soy fotosensible y que debo evitar los lugares con luces estroboscópicas».-
En el 2do relato a joven Carolina Franco, de 22 años, una tucumana que vacacionó en Mar del Plata, también vivió momentos difíciles en una disco, en una noche que no fue para nada divertida. «Fue horrible. Sentí una sensación muy rara en el pecho y me mordí toda la boca. Todos creyeron que estaba bajo los efectos del alcohol, pero no había tomado nada. Me llevaron al hospital de la ciudad y me dijeron que la convulsión había sido provocada por el flash de las luces», relató la joven. Carolina también fue sometida a una serie de análisis, que demostraron que no padece ninguna enfermedad; ni siquiera es fotosensible. Según detallaron los médicos, el cansancio y el hecho de haber estado insolada se sumaron al efecto de la luz, lo cual le produjo un shock. Ahora la joven no puede ir a bailar.
EFECTOS.
Crisis convulsiva.-
Un informe producido por el neurólogo Juan Masaguer explicó que el consumo de bebidas alcohólicas sumado a los ambientes cerrados, poco o mal ventilados, y el desvelo pueden provocar que la estimulación lumínica sea el disparador de una crisis convulsiva.
«Para poder estar despierto, hay que estar estimulado con alguna bebida energizante o alcolica que liberar una gran carga de adrenalina, lo que puede provocar que el organismo desarrolle convulsiones», explicó el médico.
Siguiendo con los informes de este especialista el doctor Masaguer, existen epilepsias fotosensibles, para las que los destellos lumínicos producen crisis. En la mayoría de los casos, les sucede a personas susceptibles de padecer epilepsia, pero que desconocen tal predisposición; lo descubren cuando el conjunto de estos factores desencadena una convulsión en el boliche. «En estas condiciones también pueden hacer fracasar los tratamientos para las personas epilépticas», afirmó el especialista.
El parpadeo de los tubos o focos afectan el sistema visual humano
El efecto que provocan las luces estroboscópicas, según los expertos, tiene que ver con la frecuencia del parpadeo de la luz, con el grado de sensibilidad de cada persona y con el tiempo en que se las percibe.
Mirta Jaén, doctora en Luz y Visión, de la UNT, trabajó sobre el parpadeo de la luz y lo que provoca en las personas. Explicó que el sistema visual humano percibe, generalmente, el parpadeo de las luces que titilan con una frecuencia comprendida entre 70 y 20 hertz (Hz), lo que significa 70 parpadeos por segundo.
Daños importantes
Por ejemplo, la luz de un tubo fluorescente parpadea 100 veces por segundo. «Esa frecuencia es imperceptible para la visión humana, pero cuando uno está durante un tiempo prolongado empieza a presentar algunos síntomas, como dolor de cabeza», dijo. «Las luces de los boliches destellan a una velocidad que va desde los 10 a los 20 Hz, son frecuencias muy bajas que llegan a la sensibilidad máxima del sistema visual. Esa percepción interfiere con los procesos neuronales», detalló Jaén. Agregó que las luces que destellan a 10 Hz son las más dañinas. «En una persona normal no suelen causar problemas, pero a las más sensibles, o con traumas neurológicos sí les pueden producir trastornos y hasta crisis cardíacas. Sobre todo si permanecen durante mucho tiempo donde hay luces fuertes y brillantes».
Si bien estos casos son de personas que van esporádicamente a boliches, como estudiante de Seguridad e Higiene, creo que se debería realizar un relevamiento de los distintos puestos de trabajos del personal que realiza tareas diarias en esos lugares así poder llegar a ver si al largo plazo, que efectos produce al personal.-