Se podría definir a la persona sociable como aquella a la que le resulta relativamente sencillo relacionarse con los demás. La mayoría de nosotros somos muy sociables a las edades más tempranas, cuando todavía tenemos la ingenuidad y transparencia de los niños. Pero, hay que reconocerlo, ya de adultos nos cuesta mucho más entablar relación con los demás.
También, lógicamente, depende de cada persona. Para algunas, la comunicación con sus semejantes es algo totalmente natural y que les sale sin ningún esfuerzo; para otras, es una auténtica montaña que escalar, llena de obstáculos en forma de inseguridades y miedo al rechazo.
En cualquier caso, la comunicación es esencial, no solo para nuestra vida social y laboral, sino también para nuestra propia autodeterminación, para saber cuál es el lugar que ocupamos en el mundo de los demás y, por qué no decirlo, para nuestra propia salud mental.
Si te consideras una persona sociable, debe ser porque cumples con la mayoría de señales detallo a continuación:
Relación cercana con los compañeros de trabajo
El lugar de trabajo puede ser un ámbito en el que predomina la competitividad y donde ca
Siempre te dicen que conoces mucha gente
Tus amigos siempre te dicen que conoces a todo el mundo y a menudo tienes conocidos en común con diferentes grupos de personas. Tener muchos contactos en el trabajo también es algo muy importante y que para las personas naturales es un talento innato. Sin embargo, tanto si eres una persona social como si no lo eres, los beneficios de tener una buena red de contactos son muy claros.
No tienes miedo a mostrar tus opiniones o sentimientos
Las personas sociables no tienen miedo a mostrarse tal y como son, no se ocultan bajo una máscara ni reprimen sus opiniones o sentimientos. La persona sociable nunca puede ser demasiado racional, ha de mostrar rasgos emocionales y empáticos. Asimismo, una persona excesivamente analítica, que piensa demasiado lo que dice o hace, también está limitando enormemente sus posibilidades sociales.
No te crees el centro de las miradas
Hay una cosa curiosa respecto a las personas tímidas, y es que, a pesar de pasar desapercibidas y no mostrar habitualmente sus opiniones o sentimientos, suelen padecer lo que se denomina como “miedo escénico”. Uno de los síntomas del miedo escénico es la sensación de que todo el mundo nos mira y nos juzga, una sensación propia de las personas inseguras y poco sociables.
Eres el que suele organizar reuniones y quedadas
¿Eres el primero que busca la unión en un grupo? ¿No dudas en ponerte en marcha para organizar cenas, excursiones, quedadas u otras maneras de socializar? Este tipo de personas sociables no solo buscan su propia interacción con el resto, sino que también disfrutan viendo cómo otras personas que ellos mismos han puesto en contacto establecen una relación más cercana.
Con el optimismo por bandera
Las personas sociales suelen ser optimistas, no aburren a los demás con problemas, inseguridades o miedos. No es lo mismo ser una persona sociable que una persona “cargante”. La persona cargante y pesimista, lo que se denomina una persona “tóxica”, también puede ser extrovertida, pero sus habilidades sociales no resultan atractivas para los demás.
Usas las redes sociales habitualmente
Y además, tienes un círculo de contactos importante, algunos de los cuales incluso los has conseguido a través de las interacciones en las propias redes sociales. Y es que, hoy en día ser sociable no solo supone mantener una actitud activa con los demás cara a cara, en las distancias cortas, sino también a través de las posibilidades que ofrecen las tecnologías.