Para las civilizaciones incas y aztecas, la quinua era sagrada. Durante 5000 años, su alimentación se basó en este cereal. Cuando llegaron los europeos no solo dominaron la política, sino que también saquearon sus alimentos. Cinco siglos después, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaro que “la quinua posee el balance de proteínas y nutrientes más cercano al ideal de alimento para el ser humano”. Además, la Nasa eligió este seudocereal, como el alimento nutritivo por excelencia para los viajes espaciales, alegando que por sí sola puede proveer una dieta balanceada. Para muchos, la quinua (Chenopodium quinua) es un alimento perfecto gracias a su equilibrio en nutrientes. Por ejemplo, posee hasta un 23% de proteína, contra un 14% de los cereales convencionales. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha evaluado la calidad de su proteína y asegura que es superior a la encontrada en los productos lácteos. Además, la Academia Nacional de Ciencia de Estados Unidos (ANC) confirma que este cereal Es una de la mejores fuentes de proteínas en el reino vegetal.